Argentina, sin lucir, se sacó de encima a Paraguay Argentina, sin lucir, se sacó de encima a Paraguay
El seleccionado argentino de básquetbol convenció, de a ratos, y terminó ganándole a su par de Paraguay, por 83 a 61, en partido válido por la cuarta fecha de la eliminatoria continental, rumbo al Mundial China 2019. En el Maxi Estadio del Parque Guerrero de Olavarría, el conjunto albiceleste superó a su par guaraní con la siguiente progresión: 25-19, 40-33, 66-46 y 83-61
Luego de la derrota del viernes ante Uruguay (83-
88), el equipo del DT Sergio Hernández quedó con un registro 3-1, al cabo de las dos primeras ventanas de clasificación.
El escolta bahiense Lucio Redivo resultó la principal vía de anotación, con 14 unidades, mientras que el ala pivote santafesino Leonardo Mainoldi, otro que salió en el banco de suplentes, contribuyó con 12 tantos (4-7 en triples).
En el arranque, el equipo del “Oveja” Hernández lució apurado, repetitivo en las ofensivas y dependió de la eficacia en los tiros exteriores, rubro en el que asomó frustrado al cabo del primer tiempo. Ni siquiera el capitán Luis Scola logró escapar a un nivel apenas discreto que permitió que -en ciertos pasajes- el combinado guaraní se situara arriba en la pizarra (17-14).
A esa altura, el susto de la noche ya había tenido lugar. Transcurría el primer cuarto y, tras una volcada de Delía, la jirafa que soportaba uno de los aros, bajó abruptamente y golpeó en la cabeza al alero Alejandro Peralta, quien debió ser retirado momentáneamente para ser atendido. Pudo haber sido más grave.
Argentina disfrutó de un buen pasaje de Brussino (3-3 en dobles) o el aporte de Redivo desde el banco (9 puntos) para disponer de una diferencia escueta de 7 (40-33), con la que se retiró al descanso largo.
En el tercer capítulo, definitivamente, el conjunto argentino ejerció una nítida supremacía e hizo valer su mayor jerarquía. Tres triples de Mainoldi, un buen pasaje del pibe Saiz y una pérdida de consistencia en la defensa paraguaya le permitió a la Argentina escaparse en la pizarra, casi sin proponérselo. El parcial terminó 26-13 y el ganador, cuando aún quedaban 10 minutos, ya quedó sellado.
En el capítulo final, la rotación permitió que ganaran rodaje Balbi, Fjellerup o Lautaro Berra, por ejemplo. Pero el ritmo fue anodino.