El Santo Padre visitó el Centro Penitenciario Femenino

Francisco visitó hoy el Centro Penitenciario Femenino, recinto que está ubicado en la zona sur de la capital chilena, en la comuna de San Joaquín. De esta manera, se convirtió en el primer Pontífice en la historia del Vaticano que desarrolla tal tarea. Una de las 1200 reclusas (la prisión tiene una capacidad para 1080) que se encuentran allí le contó su historia.

Según la descripción de Gendarmería de Chile, en este lugar se encuentran las mujeres privadas de libertad en razón de detención, mientras están puestas a disposición del Tribunal, prisión preventiva y condenadas al cumplimiento de penas privativas de libertad. La diferencia con otros, es que sus dependencias cuentan con espacios y condiciones adecuadas para el cuidado y tratamiento pre y post-natal, así como para la atención de hijos lactantes de las internas. En la actualidad alberga parte importante de la población penitenciaria de mujeres de la Región Metropolitana, siendo la más grande del país en su tipo.

Entre 1864 y 1996 la cárcel estuvo a cargo de las religiosas de la Congregación del Buen Pastor. Durante más de cien años, la baja población del centro penitenciario permitía a las cerca de 300 reclusas vivir una vida apacible y campestre.

Cada año se realiza una misa de Navidad en la Capilla Buen Pastor que está dentro de la cárcel. La celebración está a cargo del monseñor Ricardo Ezzati, Arzobispo de Santiago.

Dentro del recinto se encuentra también el patio “Mandela”, en honor al líder sudafricano Nelson Mandela. En la penitenciaría hay capacitación laboral, talleres de emprendimiento, trabajo intrapenitenciario, alfabetización y nivelación escolar.