Prorrogan preventiva a una mujer que habría asesinado a su bebé al nacer

La jueza de Control y Garantías de Añatuya, Gladys Liliana Lami, prorrogó la prisión preventiva de María Antonella López, acusada de asesinar a su bebé recién nacida y arrojarla a un basural en Pinto, departamento Aguirre, el 20 de abril último.

"Homicidio calificado por el vínculo" es la figura endilgada a la joven por la fiscal Andrea Darwich, debido a la abundancia de pruebas que pesan en su contra.

La investigación recuerda que el cuerpo de la recién nacida fue hallado dentro de una bolsa en un basural del B° Ampliación Islas Malvinas.

Testigo clave

Fue un recolector de residuos quien lanzó el dato certero: identificó la remera que cubría el cuerpito.

Pertenecía a una vecina que habituaba ver, mientras cumplía con la recolección en el barrio.

Sin querer, guió a la Justicia hasta López, quien en principio negó haber estado embarazada.

Sobrevino un examen médico que la contradijo: reveló que la sospechosa acababa de dar a luz.

Rápidamente fue allanada su casa y los policías encontraron informes médicos sobre un embarazo.

Agobiada por la culpa, López se quebró y confesó que era su hija.

Al hacerse la autopsia, los forenses informaron que la bebé nació viva, tuvo "sufrimiento fetal e hipotermia", se supo.

Resolución adversa

Sobrevino la prisión preventiva para López y una larga investigación.

ésta ahondó que la supuesta homicida tiene una pareja, pero se ignora si conocía sobre el embarazo.

Es que en las contadas ocasiones que dio su versión, López no dejó entrever por qué decidió quitarle la vida a su hija.

Los profesionales no lograron establecer el porqué de tamaña decisión. La mujer emerge como excelente madre con el hijo de 4 años, pero deviene en verdugo de su segunda hija.

Arresto domiciliario

En estos meses, la defensa intentó obtener permisos para trámites personales, pero las respuestas fueron negativas.

Asimismo, el recurso que se vendría sería el arresto domiciliario.

Al parecer, la defensa lo basaría en el cuidado que demanda su otro hijo.

Más allá de tratarse de un requerimiento razonable (sostenido en derechos del niño), emergería un dilema natural para juezas y fiscales: ¿sería sensato enviar a López al hogar con un hijo, seis meses después de asesinar a otro?l