Un voluntario de 89 años se convirtió en símbolo de solidaridad en México Un voluntario de 89 años se convirtió en símbolo de solidaridad en México
Roberto González Pulido se convirtió en símbolo de solidaridad por su trabajo como voluntario tras los sismos más devastadores que vivió México.
La fotografía que muestra a Don ROberto trasladando víveres fue publicada por la delegación de la Cruz Roja Guadalajara y ha sido compartida por miles de usuarios de Twitter y Facebook.
"Le doy las más sinceras felicitaciones a los que ayudan y agradezco que me consideren para esto, aunque a veces siento que no merezco tanto. Les agradezco la forma en que nos han ayudado y enseñado lo que estamos haciendo en la Cruz Roja", explicó Roberto al sitio Verne.
Don Roberto comenzó su trabajo de voluntario en 1949, a la edad de 21 años. Fue precisamente en septiembre cuando decidió formar parte de la Cruz Roja. "Un 16 de septiembre vi a dos elementos de la Cruz Roja que estaban repartiendo agua. Yo pregunté dónde estaba la delegación, ahí hablé con el encargado para ver si me podía recibirme porque tenía ganas de pertenecer al grupo. Así fue como empecé".
Las colectas, acopio y apoyo a los más necesitados: así fue la vida de Roberto González Pulido en los últimos 68 años y pretende seguir trabajando en ello mientras el cuerpo aguante.
Roberto González Pulido se convirtió en símbolo de solidaridad por su trabajo como voluntario tras los sismos más devastadores que vivió México.
La fotografía que muestra a Don ROberto trasladando víveres fue publicada por la delegación de la Cruz Roja Guadalajara y ha sido compartida por miles de usuarios de Twitter y Facebook.
"Le doy las más sinceras felicitaciones a los que ayudan y agradezco que me consideren para esto, aunque a veces siento que no merezco tanto. Les agradezco la forma en que nos han ayudado y enseñado lo que estamos haciendo en la Cruz Roja", explicó Roberto al sitio Verne.
Don Roberto comenzó su trabajo de voluntario en 1949, a la edad de 21 años. Fue precisamente en septiembre cuando decidió formar parte de la Cruz Roja. "Un 16 de septiembre vi a dos elementos de la Cruz Roja que estaban repartiendo agua. Yo pregunté dónde estaba la delegación, ahí hablé con el encargado para ver si me podía recibirme porque tenía ganas de pertenecer al grupo. Así fue como empecé".
Las colectas, acopio y apoyo a los más necesitados: así fue la vida de Roberto González Pulido en los últimos 68 años y pretende seguir trabajando en ello mientras el cuerpo aguante.
ROBERTO GONZáLEZ PULIDO 89 años #amor #ayuda #ejercito #gracias #live #voluntario #rescate #sismo #temblor #terremoto #vida #topos #cdmx pic.twitter.com/Mz3c5BTn2o
— Nicotronick (@nicotronick) 22 de septiembre de 2017