Bebés prematuros: la importancia del contacto con su madre para seguir viviendo Bebés prematuros: la importancia del contacto con su madre para seguir viviendo
Uno de cada diez nacimientos es prematuro, según la Organización Mundial de la Salud. Se estima que nuestro país nacen alrededor de 60.000 niños prematuros por año. Por eso, desde hoy y hasta el sábado 19 se conmemora la Semana del Prematuro de Unicef, en coincidencia con el Día Internacional del Prematuro, el 17 de noviembre. Lo que se busca en Santiago del Estero y en todo el país, desde el Ministerio de Salud, es concientizar sobre las causas y prevención de prematurez.
Por eso en esta edición de PUNTOS DE VISTA hemos convocado a la neonatóloga Margarita Coronel, a Marina Gómez, enfermera, y a la psicóloga Lic. Lucía Bonacina. Ellas trabajan en el Servicio de Neonatología del Centro Integral de Salud Banda y son algunas de las profesionales que trabajan día a día con los bebés prematuros y sus familias.
En el inicio de la mesa, la Dra. Coronel explicó que “el niño prematuro es aquel que nace con menos de 37 semanas, puede ser que tenga un peso entre 2.000 y 2.500 gramos, entre 1.500 y 2,000 o por debajo de 1.500 gramos”. Dijo, además, que “están los prematuros extremos que son los que pesan menos de 1 Kg” y que “son los que requieren de más cuidado porque tienen más posibilidades de secuelas en una vida futura”.
En este sentido, se destacó el trabajo de las enfermeras que están al cuidado de los bebés durante las 24 horas, haciendo un seguimiento permanente. “El papel que cumple la enfermera es primordial. Primero y principal, la enfermera tiene que tener mucho compromiso, responsabilidad y amor por lo que hace, porque no es un trabajo fácil”, aportó Marina Gómez, quien se desempeña como jefa de Enfermeras de Neonatología.
Además, se recalcó que “el Derecho N°4 del Decálogo del Prematuro trata de brindar cuidado de calidad, y así lo hacemos. Mantenemos la temperatura del bebé, cuidamos su neurodesarrollo, disminuimos las luces, los ruidos. Se cuida su neurodesarrollo por completo”.
Mientras el bebé permanece internado en Neonatología, desde el equipo de salud se trabaja también con el vínculo de madre e hijo y de toda la familia para que la evolución del bebé sea más notable.
En este aspecto, la Lic. Bonacina señaló: “Lo que buscamos es lograr que haya un contacto entre la mamá y el bebé. Porque muchas veces al nacer el bebé prematuramente produce en la mamá un rechazo y/o temor a perder a ese bebé, lo que genera un barrera entre el grupo familiar y el niño. Tratamos de evitar esa barrera porque sabemos que la palabra, el aroma de la mamá y sentir sus latidos en el contacto piel a piel tiene efectos muy positivos en el bebé”.
En coincidencia con la psicóloga, Marina Gómez dijo que “instamos al contacto con la mamá, que tomen la leche materna. Hablamos también con los padres. Para ellos, la incubadora es como una barrera, y nosotras estamos ahí las 24 horas para darles ánimo, para hacerlas acercar a sus bebés, para que ambos se sientan”. Además, Marina resaltó que “los pacientes son como nuestros hijos”.
Otro de los ejes en los que se llevó adelante en la mesa de PDV fue las causas de la prematurez, que resulta fundamental conocer para evitar que los niños nazcan antes de tiempo.
La Dra. Coronel hizo hincapié en que “las causas pueden ser prenatales, intraparto y post natales. Las prenatales son las más importantes porque son las que pueden prevenir la prematurez; éstas a su vez se dividen en bajo, mediano y alto riesgo. Con esto nos referimos a las patologías relacionadas a la mamá, como la hipertensión arterial, diabetes, infecciones intrauterinas, infecciones vaginales, amenazas de parto prematuro, hemorragias, la adolescencia, desnutrición u obesidad”.
Por todo ello, se concluyó que es importante que las mujeres se realicen los controles durante el embarazo para prevenir la prematurez. Y además que realicen un seguimiento de la salud de los niños prematuros para tratar las posibles secuelas y mejorar la calidad de vida de los pequeños.