Testimonios y pericias reactivan la investigación del crimen de Estela López Testimonios y pericias reactivan la investigación del crimen de Estela López
La compleja investigación por el crimen de la empresaria Estela López de Auad podría experimentar importantes avances en los próximos días según adelantaron las fuentes. Testimonios, resultados de pericias y ‘un nuevo dato’ acrecientan las expectativas en una investigación que lleva más de siete meses sin un sospechoso firme en el proceso.
Después de la feria judicial y una semana en la que se concretaron algunas diligencias, las fuentes aseguran que se avecinan días que podrían ser claves para el futuro de la investigación.
Como primera medida, varios de los testimonios que estaban previstos para la semana anterior pero que no se pudieron concretar porque no asistieron los testigos, se materializarían finalmente entre martes y miércoles.
Paralelamente, las fuentes apuntaron que la jueza que investiga el brutal asesinato, Dra. Rosa Falco, haría lugar a varias de las medidas que solicitó la querella -Dres. Hugo Frola y Ricardo Auad- entre las que se puede destacar la citación de los médicos que examinaron a la víctima el día del hecho y los forenses que le realizaron la autopsia.
Los abogados de la familia de la empresaria habían solicitado dicha medida en busca de establecer un perfil psicofísico del asesino.
Por otra parte, la Justicia recepcionaría los informes sobre algunas muestras de posibles huellas encontradas en la escena del crimen, lo cual podría permitir avanzar significativamente en la búsqueda del autor del hecho.
Varias de las fuentes consultadas coincidieron en que esta semana podrían surgir importantes novedades en torno al hecho; incluso una de las fuentes afirmó que “hay un dato que puede cambiar el escenario de lo que se conoce hasta el momento”.
Cabe recordar que Estela López fue asesinada de más de 20 puñaladas el pasado 23 de diciembre entre las 14 y las 16. Su cuerpo fue hallado recién en horas de la noche. Aún tenía un cuchillo clavado en el cuello.
Tras más de siete meses de investigación, no hay una pista firme del autor que pareciera no haber dejado ningún rastro en la sangrienta escena.