El abigeato provoca enormes pérdidas en la zona de Loreto

LORETO, Loreto (C) Tomás Villa es un productor rural de 76 años que durante toda su vida trabajó en el interior loretano, y tiene el pleno convencimiento de que desde hace aproximadamente tres años tiene unos socios invisibles que se quedan con más del cuarenta por ciento de su trabajo.

“Los cuatreros se llevan siempre lo mejor de lo que tenemos, no les importa si son vaquillonas, terneros, chanchos, capones o son cabritos, cualquier cosa mientras sea ajeno”, se quejó.

“Yo nací y me crié en este mismo lugar donde trabajé durante toda mi vida, y siempre lidiamos con los cuatreros, pero desde el año 2008 la situación comenzó a empeorar”, dijo.

Recordó: “Comenzamos a sufrir la pérdida de un animal vacuno por mes, sin contar los animales caprinos que se llevan y que muchas veces no tomamos en cuenta. Si nos roban una vaca por mes, en un año nos dejan sin nada”, estimó lleno de indignación don Tomás Villa.

Subsistencia

Esquina Pozo es una localidad que se encuentra a aproximadamente 20 kilómetros al este de esta ciudad, donde viven alrededor de quince familias que se dedican fundamentalmente a la cría de ganado menor y mayor en pequeña escala.

Su economía se complementa en casi todos los casos con el trabajo temporario de los hombres que viajan a realizar tareas como peones golondrinas en zonas de alta producción agropecuaria, generalmente fuera del territorio santiagueño.

“Una noche, en el año 2010, estábamos acostados y sentimos un tiro; me levanté y caminé entre la oscuridad, y tres cuatreros habían matado uno de mis toritos y lo estaban carneando. Ellos me alcanzaron a ver y se escaparon dejando todo en el lugar hasta una escopeta, andaban en una camioneta color clara que unos días después la vi en Loreto, avisé a la policía y los detuvieron”, narró el productor del interior loretano.

El sector donde está ubicada Esquina Pozo tiene innumerables senderos que se comunican con las rutas importantes que recorren la región, tales como las vías que une esta ciudad con Brea Pozo y hacia el sur con la ruta que se dirige a Villa Atamisqui.

Esta situación hace todavía más difícil el control y la persecución de los cuatreros.

“Hay mucho faenamiento clandestino de animales vacunos en el campo, y esto favorece también al cuatrerismo, porque se matan animales y nadie sabe a quien les pertenecen y las carnicerías están siempre con carne para vender, y viene gente del pueblo a comprar porque es muy barata, o llevan a entregar en carnicerías de Loreto”, denuncia el productor septuagenario.l