¿Educación Sexual? "de eso no se habla"
Por Amanda Enríquez de Corbalan*
La Ley Nacional 26.150 es la Ley de Educación Sexual Integral sancionada en el 2006 y el Programa Nacional de Educación Sexual Integral creado a partir de ella garantizan a nivel nacional, provincial, municipal y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el derecho a recibir Educación Sexual Integral tanto en escuelas de gestión estatal como privada, laicas o confesionales. Incluye a todos los niveles educativos: inicial, primario, secundario y terciario no universitario y a la formación docente, adecuando los contenidos de manera gradual, de acuerdo con la edad de los estudiantes.
Sin embargo, hablar de educación Sexual en los últimos años se convirtió en la representación social en un tema tabú en algunas instituciones, incluido la iglesia y esto se debe a la mala orientación, desconocimiento y mala implementación, en algunos casos, de la ley de Educación sexual y sus objetivos.
Según investigaciones en la provincia de Santa Fe las principales expresiones de padres en contra de la enseñanza de ESI (Educación Sexual Integral) fueron "les van a enseñar a tener sexo a los chicos", "deben pedirme autorización", "promueven la estimulación sexual temprana" "adoctrinan la ideología del sexo", "ese tema se trabaja solo en casa", expresiones apoyadas en malas estrategias de enseñanza en el aula.
La educación sexual integral es un espacio sistemático y continuo de enseñanza y aprendizaje que no se limita a una sola intervención educativa, la exhibición de una película alusiva al tema o la charla de un especialista. Entiende la sexualidad como una dimensión en la vida de las personas que se desarrolla desde el nacimiento y que no se refiere solo a la genitalidad, sino que vincula varios aspectos, como los sentimientos y la afectividad, la identidad, las formas de relacionarnos con otros y de experimentar el placer, el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos, y el reconocimiento y cuidado del propio cuerpo y el cuerpo del otro.
De esta manera se estimulan y fortalecen valores como la solidaridad, el respeto, la inclusión y la participación ciudadana. Esta concepción integral entiende que es necesario educar en sexualidad en todas las etapas de la vida educativa y por eso incorpora la ESI desde el nivel inicial hasta el superior.
Con la resolución N° 476/24el Consejo Federal de Educación, definió nuevos "lineamientos curriculares" para las carreras de formación docente.
El Gobierno nacional y las provincias acordaron una serie de cambios en la formación docente y prescribe entre las reformas: "En cumplimiento de las actuales regulaciones sobre la Educación Sexual Integral en la Formación Docente Inicial (Res. CFE 340/18), se establece la presencia de la nueva unidad curricular "Educación Sexual Integral" que garantice a los futuros docentes un abordaje integral de la sexualidad independientemente de la disciplina específica en la que se esté formando, de tal modo que, en el ejercicio docente, dé cumplimiento a los Núcleos de Aprendizaje Prioritarios en materia de ESI en todos los niveles obligatorios del sistema y sus modalidades.
Por lo tanto, resulta evidente la necesidad de actualización sobre la temática a docentes de todos los niveles y modalidades.
* Profesora de Ciencias de la Educación (UCSE) / Especialista en Educación Superior (UNSE) / Presidente de ADIMyT.