Viceversa

Historia y ficción de la Primera Entrada en el cuento "El antídoto" de Jorge Raúl Lima

Olga Astudillo 

   Raúl Jorge Lima fue abogado y narrador reconoció, entre otras , la influencia de Manuel Mujica Laínez reflejada en sus obras ya que usa la misma técnica moderna de contar, el humor sutil, ese toque de ironía encubierta e interés por la historia o hechos del pasado. En la década del 90 publicó Cuentos de Lesa Literatura el libro marca una declaración de principios, tomará de su profesión los elementos para construir historias a las que añadirá una forma literaria, la elección del título ensambla esos aspectos de su narrativa.

Otro detalle del perfil literario que Lima confesaba en las entrevistas era su heredado interés por la Historia Argentina que luego ampliaría por la Historia de Santiago del Estero. La ciudad, esta ciudad fue testigo de sus caminatas bajo la canícula sofocante con impecable saco blanco, con su cuidada y canosa barba que lo transformaba en señorial personaje de su admirado Manucho.

  En la última década del siglo XX, entre los grupos de amigos circulaba la fama de su exquisita conversación, su erudición con la que matizaba los encuentros, el ritmo pausado y buen humor, al estilo de los intelectuales decimonónicos. El autor sustentó su experiencia como prosista ensamblando especialmente dos temas atractivos: la historia y la narrativa de cuentos, novelas como lo demostró con la publicación de sus libros, también destacamos su perseverancia, la obsesiva búsqueda que condujo a la distinción de su obra entre lectores y críticos. 

   La obra seleccionada se titula "El Antídoto" de tema histórico sobre la Primera entrada de los españoles y la muerte de Diego de Rojas en un territorio inhóspito que luego de varias centurias sería parte la provincia de Santiago del Estero. 

  El tema de la Entrada combina para el escritor sus dos pasiones la Literatura y la Historia; con ingenio, la fluidez del relato y el interés por la Historia de esta región del norte argentino, motivan la escritura del cuento, combina episodios reales y ficcionales, los narra con gran habilidad al elaborar un desenlace sorprendente o al menos no convencional. 

Según Barthes: …la escritura es una realidad formal situada entre la lengua y el estilo personal de un autor, a través de la escritura, acto de solidaridad histórica se crea la relación entre la creación y la sociedad es un conjunto de elecciones que implica una moral, una intención, una visión de la Historia y un modo de pensar la Literatura, por el cual se canaliza en el escritor la Historia y la Tradición porque el lenguaje nunca es inocente: actúa como memoria de la colectividad.   

   "El Antídoto" se aproxima a estas especificaciones ya que rescata un suceso de la historia de la Conquista, un hecho lamentable cuando acontecieron incontables tragedias en diferentes puntos del continente americano, no obstante en la búsqueda de identidad local del pueblo, la muerte de Diego de Rojas alcanza la cumbre de lo trágico transformando la historia en leyenda. A pesar del tiempo transcurrido aún permanece sin develar la causa certera de la muerte Diego de Rojas ya que cada escritor brinda su hipótesis.

Atento a su época Raúl Lima además de tomar el episodio histórico también apela al uso de epígrafe: un fragmento de testimonio sobre un conquistador quien ingresó con la expedición de Diego de Rojas. Desde este epígrafe señala cuáles son las fuentes históricas de este relato el testimonio de Antón Griego ambos le sugieren al lector que la narración se ajustará fielmente a los hechos históricos, de modo que desde la primera página el narrador se asegura una recepción transparente. 

 La ruptura de la cronología de los hechos será otra manera particular de contar, comienza con lo acontecido el cuarto día, posterior al enfrentamiento entre españoles e aborígenes, allí Diego de Rojas fue herido por una flecha e inmediatamente en el discurso se abre una analepsis con el fluir de la conciencia del protagonista mediante el uso de breves oraciones que narran su vida privada y su brillante carrera de militar y político en América. Este fluir del pensamiento se interrumpe por la inclusión de la carta de Vaca de Castro al Rey de España en la que solicitaba autorización para que el capitán Diego de Rojas realizara la expedición al Tucma. El narrador omnisciente continúa desgranando datos históricos sobre la expedición y la distribución de los mandos con los jefes y sus soldados. 

   Otro salto temporal ya que transcurrieron ocho meses desde la partida de Cuzco hasta este momento de la historia que aparece gramaticalmente detallado con el uso reiterado del demostrativo "esta": esta misión, esta tierra, esta herida. Muy adecuado y lírico el enlace del tiempo presente que se une al comienzo del texto cuando expresa, más tarde, en la tarde ardiente del verano santiagueño. 

  La acción debe intensificarse y así sucede con la presentación de Francisco de Mercado, joven y ambicioso de poder, quien con insidia culpa a Catalina de Enciso, quien estaría envenenando al jefe de la expedición. El narrador tal vez presenta hechos imaginarios o alejados de la historia, pareciera que ser mujer y concubina era una situación marginal a pesar de formar parte de un grupo de harapientos soldados temerosos y sedientos perdidos en tierras desconocidas. Aquí nuevamente el fluir de la conciencia devela la duda de Diego de Rojas y enriquece el relato con elementos de tragedia: la traición, la ambición, el desprecio, la injusticia, entre otros. 

El cuento se sostiene con otra marca temporal la cual se detecta en el párrafo que comienza "ya es el quinto día de su herida" luego la narración se precipita porque el jefe designa al joven Francisco de Mendoza como sucesor aquí la enfermedad no justifica la ruptura del pacto firmado antes de partir y finalmente se llega la sexto día: enloquecido de dolor Diego de Rojas recuerda que alguien habló de un antídoto. En este momento el narrador se aparta de la Historia y apela a la imaginación del lector para seguir colocando a Diego de Rojas en el centro de la narración.

          El artilugio de lastimar a un indio sano con una flecha supuestamente envenenada se atribuye a Diego de Rojas, ante esto destacamos la adhesión del autor a una teoría histórica que sostiene que algunas tribus de la región usaban flechas envenenadas , pero Lima con una mirada revisionista o tal vez solo como recurso narrativo cambia el final de la tradición y muestra la lealtad del aborigen con su pueblo, ya que elige la opción menos esperada, el narrador nos brinda otra vuelta de tuerca a lo conocido.

    "su oído… le indica que su libertad no es verdadera… SABEN LO QUE QUIEREN (los hombres blancos) pero… por él no hallarán; también conoce a la otra con la enherbola sus flechas que arranca y machaca hasta transformarla en un zumo tan oscuro como su segura muerte y lo bebe, hasta el final lo bebe" 

 Con sutiles recursos el narrador oculta los hechos pero el punto de vista gira hacia el "enemigo" con la descripción casi científica de las hierbas, ahora será la oportunidad para verificar la fidelidad y defensa de su tierra y de su raza, esto excede a la Historia que pretende ser objetiva, surge en el texto las diversas opciones. Estamos frente a un relato donde el punto de vista cambia desde lo que le acontece a Diego de Rojas y al aborigen víctima, elegido al azar para descubrir el antídoto. 

En la primera parte del cuento cuando se marcaban los días puntualizamos el comienzo in media res porque transcurrieron cuatro días desde que Diego de Rojas fuera herido, el cuento carece de una introducción clásica, omitió el enfrentamiento con los indígenas donde fuera herido Diego de Rojas.

 Se destaca la actitud de heroicidad del aborigen al ingerir las hierbas que le provocarían un fatal desenlace y no aquellas selectas que eran el antídoto para el veneno usado en sus armas. Es una lección moral de optar por lo colectivo en detrimento de lo individual. El final inesperado (en el estilo de los grandes cuentistas) está dado por el ingenio y la maestría de Raúl Jorge Lima en la escritura del cuento. 

En conclusión el cuento parece responder a los lineamientos citados previamente: no hay discurso inocente, el lector no solo debe entretenerse sino ir más allá de lo contado, aquí se incorporan también conceptos de un avance de perspectiva histórica para la época en que fuera escrito, como el lector está advertido sobre la ficción que tiene en sus manos, este texto adquiere el carácter de invitación para continuar leyendo, el receptor encontrará otros sentidos y podrá discutirlos según su experiencia de lectura.

   Raúl Jorge Lima fue abogado y narrador reconoció, entre otras , la influencia de Manuel Mujica Laínez reflejada en sus obras ya que usa la misma técnica moderna de contar, el humor sutil, ese toque de ironía encubierta e interés por la historia o hechos del pasado. En la década del 90 publicó Cuentos de Lesa Literatura el libro marca una declaración de principios, tomará de su profesión los elementos para construir historias a las que añadirá una forma literaria, la elección del título ensambla esos aspectos de su narrativa.

Otro detalle del perfil literario que Lima confesaba en las entrevistas era su heredado interés por la Historia Argentina que luego ampliaría por la Historia de Santiago del Estero. La ciudad, esta ciudad fue testigo de sus caminatas bajo la canícula sofocante con impecable saco blanco, con su cuidada y canosa barba que lo transformaba en señorial personaje de su admirado Manucho.

  En la última década del siglo XX, entre los grupos de amigos circulaba la fama de su exquisita conversación, su erudición con la que matizaba los encuentros, el ritmo pausado y buen humor, al estilo de los intelectuales decimonónicos. El autor sustentó su experiencia como prosista ensamblando especialmente dos temas atractivos: la historia y la narrativa de cuentos, novelas como lo demostró con la publicación de sus libros, también destacamos su perseverancia, la obsesiva búsqueda que condujo a la distinción de su obra entre lectores y críticos. 

   La obra seleccionada se titula "El Antídoto" de tema histórico sobre la Primera entrada de los españoles y la muerte de Diego de Rojas en un territorio inhóspito que luego de varias centurias sería parte la provincia de Santiago del Estero. 

  El tema de la Entrada combina para el escritor sus dos pasiones la Literatura y la Historia; con ingenio, la fluidez del relato y el interés por la Historia de esta región del norte argentino, motivan la escritura del cuento, combina episodios reales y ficcionales, los narra con gran habilidad al elaborar un desenlace sorprendente o al menos no convencional. 

Según Barthes: …la escritura es una realidad formal situada entre la lengua y el estilo personal de un autor, a través de la escritura, acto de solidaridad histórica se crea la relación entre la creación y la sociedad es un conjunto de elecciones que implica una moral, una intención, una visión de la Historia y un modo de pensar la Literatura, por el cual se canaliza en el escritor la Historia y la Tradición porque el lenguaje nunca es inocente: actúa como memoria de la colectividad.   

   "El Antídoto" se aproxima a estas especificaciones ya que rescata un suceso de la historia de la Conquista, un hecho lamentable cuando acontecieron incontables tragedias en diferentes puntos del continente americano, no obstante en la búsqueda de identidad local del pueblo, la muerte de Diego de Rojas alcanza la cumbre de lo trágico transformando la historia en leyenda. A pesar del tiempo transcurrido aún permanece sin develar la causa certera de la muerte Diego de Rojas ya que cada escritor brinda su hipótesis.

Atento a su época Raúl Lima además de tomar el episodio histórico también apela al uso de epígrafe: un fragmento de testimonio sobre un conquistador quien ingresó con la expedición de Diego de Rojas. Desde este epígrafe señala cuáles son las fuentes históricas de este relato el testimonio de Antón Griego ambos le sugieren al lector que la narración se ajustará fielmente a los hechos históricos, de modo que desde la primera página el narrador se asegura una recepción transparente. 

 La ruptura de la cronología de los hechos será otra manera particular de contar, comienza con lo acontecido el cuarto día, posterior al enfrentamiento entre españoles e aborígenes, allí Diego de Rojas fue herido por una flecha e inmediatamente en el discurso se abre una analepsis con el fluir de la conciencia del protagonista mediante el uso de breves oraciones que narran su vida privada y su brillante carrera de militar y político en América. Este fluir del pensamiento se interrumpe por la inclusión de la carta de Vaca de Castro al Rey de España en la que solicitaba autorización para que el capitán Diego de Rojas realizara la expedición al Tucma. El narrador omnisciente continúa desgranando datos históricos sobre la expedición y la distribución de los mandos con los jefes y sus soldados. 

   Otro salto temporal ya que transcurrieron ocho meses desde la partida de Cuzco hasta este momento de la historia que aparece gramaticalmente detallado con el uso reiterado del demostrativo "esta": esta misión, esta tierra, esta herida. Muy adecuado y lírico el enlace del tiempo presente que se une al comienzo del texto cuando expresa, más tarde, en la tarde ardiente del verano santiagueño. 

  La acción debe intensificarse y así sucede con la presentación de Francisco de Mercado, joven y ambicioso de poder, quien con insidia culpa a Catalina de Enciso, quien estaría envenenando al jefe de la expedición. El narrador tal vez presenta hechos imaginarios o alejados de la historia, pareciera que ser mujer y concubina era una situación marginal a pesar de formar parte de un grupo de harapientos soldados temerosos y sedientos perdidos en tierras desconocidas. Aquí nuevamente el fluir de la conciencia devela la duda de Diego de Rojas y enriquece el relato con elementos de tragedia: la traición, la ambición, el desprecio, la injusticia, entre otros. 

El cuento se sostiene con otra marca temporal la cual se detecta en el párrafo que comienza "ya es el quinto día de su herida" luego la narración se precipita porque el jefe designa al joven Francisco de Mendoza como sucesor aquí la enfermedad no justifica la ruptura del pacto firmado antes de partir y finalmente se llega la sexto día: enloquecido de dolor Diego de Rojas recuerda que alguien habló de un antídoto. En este momento el narrador se aparta de la Historia y apela a la imaginación del lector para seguir colocando a Diego de Rojas en el centro de la narración.

          El artilugio de lastimar a un indio sano con una flecha supuestamente envenenada se atribuye a Diego de Rojas, ante esto destacamos la adhesión del autor a una teoría histórica que sostiene que algunas tribus de la región usaban flechas envenenadas , pero Lima con una mirada revisionista o tal vez solo como recurso narrativo cambia el final de la tradición y muestra la lealtad del aborigen con su pueblo, ya que elige la opción menos esperada, el narrador nos brinda otra vuelta de tuerca a lo conocido.

    "su oído… le indica que su libertad no es verdadera… SABEN LO QUE QUIEREN (los hombres blancos) pero… por él no hallarán; también conoce a la otra con la enherbola sus flechas que arranca y machaca hasta transformarla en un zumo tan oscuro como su segura muerte y lo bebe, hasta el final lo bebe" 

 Con sutiles recursos el narrador oculta los hechos pero el punto de vista gira hacia el "enemigo" con la descripción casi científica de las hierbas, ahora será la oportunidad para verificar la fidelidad y defensa de su tierra y de su raza, esto excede a la Historia que pretende ser objetiva, surge en el texto las diversas opciones. Estamos frente a un relato donde el punto de vista cambia desde lo que le acontece a Diego de Rojas y al aborigen víctima, elegido al azar para descubrir el antídoto. 

En la primera parte del cuento cuando se marcaban los días puntualizamos el comienzo in media res porque transcurrieron cuatro días desde que Diego de Rojas fuera herido, el cuento carece de una introducción clásica, omitió el enfrentamiento con los indígenas donde fuera herido Diego de Rojas.

 Se destaca la actitud de heroicidad del aborigen al ingerir las hierbas que le provocarían un fatal desenlace y no aquellas selectas que eran el antídoto para el veneno usado en sus armas. Es una lección moral de optar por lo colectivo en detrimento de lo individual. El final inesperado (en el estilo de los grandes cuentistas) está dado por el ingenio y la maestría de Raúl Jorge Lima en la escritura del cuento. 

En conclusión el cuento parece responder a los lineamientos citados previamente: no hay discurso inocente, el lector no solo debe entretenerse sino ir más allá de lo contado, aquí se incorporan también conceptos de un avance de perspectiva histórica para la época en que fuera escrito, como el lector está advertido sobre la ficción que tiene en sus manos, este texto adquiere el carácter de invitación para continuar leyendo, el receptor encontrará otros sentidos y podrá discutirlos según su experiencia de lectura.

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