"Los adultos mayores pierden la sensación de sed, y corren un serio riesgo de deshidratarse"
A medida que las personas envejecen, son menos propensas a notar la sed. Por lo tanto es posible que no tomen líquidos cuando lo necesitan. Se recomienda entre un litro y un litro y medio de agua por día.
En estos tiempos de intenso calor por los que atraviesa nuestro país, el de los adultos mayores es uno de los grupos etarios (junto a los niños), más propensos a sufrir consecuencias severas. Uno de los principales problemas radica que con la edad se va perdiendo la sensación de sed, lo que produce que no se consuma la cantidad de agua suficiente en el día, y la persona sufra una deshidratación.
Las personas mayores son bastante propensas a deshidratarse, en especial en la época de verano, cuando las temperaturas aumentan considerablemente. El agua es un elemento esencial en el organismo humano y si bien su proporción en el cuerpo va disminuyendo con el pasar de los años, su importancia sigue siendo la misma.
En este sentido, el Dr. Eduardo Gómez Colombo, médico geriatra de Santiago del Estero, explicó que "las personas mayores van perdiendo la sensación de sed, como pierden otros sentidos, como la vista o el oído, pero el peligro radica en que no ingieren agua, y eso puede contribuir a deshidratarse más rápido en estas épocas de intenso calor".
"Tomar agua, en la edad avanzada significa prevenir la deshidratación. Y la principal recomendación es tener una botella de un litro de agua, y consumirla durante el día. Es la mejor forma de prevenir la deshidratación en la edad avanzada, porque uno se da cuenta que está consumiendo líquido, porque al no tener sed, se cree que se está hidratado y que se está tomando lo suficiente y no es así. Este es un parámetro, tener una botella de un litro o un litro y medio y consumirla durante el día", precisó el profesional.
Advirtió que el agua que se consuma sea de "buen origen", y que esa medida de un litro a un litro y medio por día "esa es la cantidad recomendada, más allá de las infusiones u otras bebidas refrescantes" que se consuman a diario.
"Aquellas personas mayores que realizan una actividad física, lo cual es muy beneficioso para la salud, deben hacerlo fuera del horario de temperaturas altas, y consumir agua, lo importante es controlar que se tome la cantidad adecuada durante el día", aseguró Gómez Colombo.
Pidió a quienes conviven con el adulto, presten atención a la cantidad de agua que consume.