Un dato para festejar, con varios claroscuros atrás

El 2.7% de inflación, ¿es para festejar? Para el Gobierno, sin duda. Bajar del 25% en diciembre del 2024 a este 2.7% es un logro. Hay también buena parte de la población que lo está disfrutando, aquellos trabajadores que lograron una pauta salarial por encima de la inflación. No fueron todos. Es más, se podría contar con los dedos de una mano. Pero esta velocidad en bajar la inflación nadie lo había hecho antes. Es lo que Milei prometió en campaña y está haciendo.

Ahora bien. El costo de este ajuste para estabilizar la economía recayó en provincias (la caída de ingresos no automáticos por fuera de la Coparticipación fue drástico); los jubilados que en este contexto de baja de inflación verán aumentos más chicos. Su fórmula de ajuste es por la inflación de dos meses atrás. Baja la inflación, baja su nivel de aumentos. Hay que tener en cuenta que aun subiendo un 100% a los jubilados, la mínima no llegaría a $600.000. Y también la "casta" de trabajadores. Aquí, si bien el Índice Salarial marca un aumento promedio hasta octubre de 174% contra una inflación de 193% interanual a ese mismo mes, hasta entonces aún corría de atrás a la inflación. Pero a nivel oficial señalan que el salario le gana a la inflación en noviembre y en diciembre. El Indec publicará en los próximos días la evolución del salario de noviembre y el mes próximo la de diciembre. Ahí, veremos.

Es cierto que la inflación acumulada cayó y que el salario tuvo un crecimiento. Pero hay algunas cuestiones a tener en cuenta. Primero que el IPC es un promedio de los 12 rubros que mide el Indec para dar el dato de inflación. Al analizar cómo evolucionaron en forma interanual hay varios subrubros que fueron muy por encima de la inflación. Por ejemplo, la inflación de diciembre interanual fue de 117%. Eso es un promedio. Pero hubo rubros como Prepagas (Salud); Telefonía Celular (Comunicaciones) o Alquileres que promediaron el 190%. Educación, en lo que respecta al aumento de cuotas en colegios privados también subió muy por encima de la inflación. Es decir, este buen dato inflacionario de diciembre, que pese a todo lo pasado no deja de ser bueno, esconde también todas estas otras variables: Son aumentos que pegaron y pegan aún en el día a día de la gente. Por eso, aún con este dato inflacionario bajo, la gente siente que todavía está llegando con lo justo o menos a fin de mes. Que no le sobra nada.

Es buena sin duda la estabilidad de precios. Ir al súper y que las cosas no suban desmedidamente todos los meses a como estábamos acostumbrados. Se llega con lo justo o ahí, en aquellos casos que tienen un empleo, un salario. No olvidemos que unos 200 mil empleos se perdieron con la recesión que provocó el gobierno para implementar este plan de estabilidad. Ahora, el Gobierno con la baja de inflación también trae otra novedad: no va a homologar pautas salariales por encima del 1% mensual. Eso significa que, máximo, los salarios podrían subir 24% en 2025. Pero hay servicios como la educación privada, que ya metieron aumentos para 2025, muy por encima de esa pauta con la cual el Gobierno pretende volver a marcar la cancha a la inflación.

El objetivo oficial es que la baja de la inflación actúe como un aumento extra en los salarios. Que con lo mismo o un poquito más de salario (1%) la gente pueda adquirir algo más de productos. Pero la inflación es un promedio. Por fuera del promedio, hay precios que corren muy por encima de los salarios. Y son cuestiones básicas: la Educación, la Comunicación por la conectividad que hoy es tan necesaria en todos los ámbitos.

Pero no es todo. Hay más cuestiones que este modelo tendría que ajustar. Los salarios por lo pronto estarán bajo la mira. Aunque si se ve lo que está pasando en estas vacaciones con miles de argentinos yendo al exterior, con otros tantos veraneando en la costa argentina, parecería que todo lo peor ha quedado atrás. ¿Será así?

A fin de año, el presidente Milei reunió a su equipo para felicitarlos por el trabajo realizado, pero también para recordarles que van 20 minutos de un partido de 90. Con todo lo que pasó en 2024, que la gente haya tolerado el mayor ajuste en la historia, también marca un poco el contexto previo. El 2025 debería ser un año de crecimiento. Con que haya recuperación ya sería muy importante. El asunto es que sea un poco más homogénea.