Santiago

Arde Santiago: cómo cuidar la piel ante las altas temperaturas y la exposición al sol

En los días de calor es importante tener ciertos cuidados para proteger la piel, entre ellos la elección de la vestimenta adecuada. El uso de protector solar resulta fundamental para prevenir enfermedades.

Santiago arde. Con temperaturas máximas de más de 38º y sensaciones térmicas que superan ampliamente los 41º durante todos estos últimos días, los especialistas se ven obligados a difundir medidas de prevención para evitar complicaciones.

En estos días, la exposición al sol puede poner en riesgo la salud de la piel, por lo cual es fundamental tomar precauciones y adoptar hábitos de cuidado que nos protejan durante esta temporada.

"La exposición solar, a través de las radiaciones ultravioleta (UV), puede producir graves daños en la piel. Algunas lesiones aparecen en forma inmediata, como las quemaduras y las ampollas. Otras como el envejecimiento prematuro de la piel, las manchas y hasta el cáncer de piel se pueden presentar a lo largo de los años, ya que los efectos nocivos de estas radiaciones se acumulan en el tiempo", explica la Dra. Valeria El Haj.

En cuanto a las medidas de prevención, el protector solar es lo más importante y cómo usarlo correctamente también. Por eso, a la hora de exponerse al sol, hay que tener en cuenta que se debe aplicar media hora antes de exponerse al sol, incluso los días nublados, tiene que ser suficiente cantidad y se debe distribuir de manera uniforme. Además, el protector solar debe renovarse cada dos o tres horas, mientras uno esté al aire libre y al salir de la pileta o el mar.

Es importante recordar que el protector solar no es la única herramienta para protegernos del sol, ya que, factores como los horarios y la duración de la exposición, la elección de la vestimenta adecuada y otras medidas también desempeñan un papel fundamental.

Dato

Un especial cuidado se debe tener en la provincia, puesto que los días de intenso calor son permanentes, y las altas temperaturas comienzan a sentirse incluso mucho antes de las 10 de la mañana, y se sostiene hasta mucho más de las 17 horas (franja horaria declarada como la más riesgosa).

Cómo cuidarse de las quemaduras

Una cicatriz, ya sea de tipo normal, hipertrófica o queloide, es el resultado de un daño profundo en la piel, explicó la especialista. A pesar de la increíble capacidad de la piel para regenerarse, las cicatrices dejan una marca visible en la superficie.  

Por su parte, las quemaduras, también son profundas, pero se producen por agentes agresivos de gran intensidad como el fuego directo, inflamables u otros de igual naturaleza o por el contacto prolongado con otros agentes. En estas situaciones, la destrucción de la piel es total y, por lo tanto, no hay posibilidad de recuperación espontánea.

Es fundamental cuidar tanto las quemaduras o cicatrices, especialmente durante el verano, cuando las altas temperaturas pueden complicar su recuperación. Por eso, se recomienda:

Evitar el sol: una cicatriz en proceso de curación es tremendamente sensible a la radiación UV y su exposición puede hacer que se pigmente y dejé una lesión mucho mayor y visible.

Evitar el mar y la pileta: el cloro, la sal y la humedad alargan el tiempo de cicatrización y, por lo tanto, aumentan las posibilidades de que lo haga de manera irregular.

Protección solar: sí o sí, una cicatriz expuesta al sol siempre debe protegerse con un protector solar Spf50 + de amplio espectro y repetir la aplicación con frecuencia.

Hidratación y nutrición: una cicatriz es una piel curándose, organizándose y reparándose a marchas forzadas. La hidratación y la nutrición son fundamentales para fortalecer los tejidos y ayudarlos a enfrentar estas situaciones.

En cuanto a la alimentación, aunque no hay evidencia de que algún alimento proteja directamente contra los daños del sol, una dieta saludable y variada contribuye a mantener la piel en buen estado.

Tips: algunas pautas que se deben cumplir

Entre los puntos importantes a tener en cuenta para evitar las consecuencias de la exposición al sol se encuentran:

*Evitar la exposición solar en las horas de máxima irradiación (de 11 a 16 en los meses de verano).

*Realizar exposiciones cortas y progresivas al sol.

*Proteger la piel con ropa, sombrero y usar gafas de sol.

*No utilizar fragancias o cosméticos que puedan contener alcohol o sustancias que causen fotosensibilidad.

*Extremar la protección solar frente a cualquier actividad al aire libre.

*No olvidar que en días nublados también hay que cuidarse de la radiación ultravioleta y debemos tomar todas las medidas mencionadas.

Advierten sobre los cuidados de la piel durante el tratamiento oncológico: se deben acentuar las medidas

El cuidado de la piel frente al sol es especialmente importante para las personas que recibieron quimioterapia, ya que el tratamiento puede aumentar la sensibilidad de la piel y su propensión a sufrir daños.

Además, se pueden producir cambios en la piel como sequedad, irritación y manchas. E

stas alteraciones suelen ser transitorias y dependen del tipo de tratamiento. Por eso, se recomienda proteger la piel del sol: aplicar protector solar de amplio espectro con FPS 50+ todos los días, incluso si está nublado; elegir fórmulas suaves, hipoalergénicas y diseñadas para piel sensible; reaplicar cada dos horas, especialmente al estar al aire libre, sudar o después de nadar; limitar la exposición directa al sol, sobre todo entre las 10 y las 16; buscar sombra siempre que sea posible y organizar actividades en horarios de menor radiación solar; usar ropa de manga larga con protección UV incorporada para mayor cuidado; complementar con sombreros de ala ancha que cubran rostro, cuello y orejas; y proteger los ojos con gafas de sol certificadas con filtro UV.

Por otro lado, los lunares y manchas pueden ser signos inofensivos o alertas de condiciones más serias, como el melanoma. Por eso, mantener registro fotográfico de exploraciones de tu piel es fundamental para detectar cambios en la cantidad, forma o tamaño con el tiempo.

Ir a la nota original

MáS NOTICIAS