Hallan muerto a un guardiacárcel y los forenses develarán hoy en autopsia: suicidio u homicidio
Sospechan que la muerte sobrevino entre la medianoche y la madrugada. Huellas, ropa, familia y celular, lo clave para desentrañar el misterio. SECCIONAL 45 David Frontera ha sido encontrado por dos hombres, a metros de Solís y Circunvalación
Un guardiacárcel del Penal de Varones, en Alsina 850, fue hallado ayer muerto debajo de un árbol, junto al canal San Martín, y los forenses hoy develarán si se trató de un homicidio o un suicidio.
Misterio, desconcierto y perplejidad eran el común denominador en torno al triste fin de David Frontera, quien ayer a la mañana movilizó a peritos, efectivos de la Seccional 45 y personal de la División Homicidios y Delitos Complejos.
El epicentro del horror fue cerca del canal San Martín, a pocos metros del cruce con la avenida Solís y Circunvalación. En la mañana, dos hombres encontraron el cuerpo del joven, quien cumplía funciones en la guardia interna del organismo de seguridad.
Aluvión de funcionarios
Por disposición de la Fiscalía de turno, arribaron policías y profesionales especializados: al cierre, obviamente, los expertos debatían sobre las dos teorías opuestas: un crimen, o un suicidio.
Un testigo confió que la hipótesis es que la muerte sobrevino el domingo a la noche, más bien cerca de la medianoche: por las huellas, la ausencia de personas en la antevíspera y el "rigor mortis": representa la rigidez muscular que se produce en un cadáver tras la muerte.
Se manifiesta cuando los músculos pasan de un estado relajado a uno rígido e inflexible, debido a la falta de energía y ciertas sustancias químicas. El rigor mortis suele aparecer entre 4 y 10 horas después del deceso y dura entre 3 y 4 días.
Nadie escuchó nada
Mientras los profesionales realizaban una especie de asistencia externa al cuerpo, varios vecinos inmediatos habrían señalado no haber escuchado nada.
En forma paralela, la Justicia tomaba anoche testimonios a familiares de la víctima: problemas personales, deudas, enemigos, personalidad particular, enfermedad, representaban las incógnitas por evacuar.
Después de casi dos horas de tarea, la Justicia dio luz verde al traslado de los restos de Frontera al Hospital Independencia. Ahora, los forenses verificarán y antes del mediodía elevarán un informe preliminar a los investigadores.
Funcionarios especializados, ávidos de respuestas clave
Efectivos de la División Criminalística trabajaban ayer en torno a las últimas horas con vida de Frontera. Sin mínimas certezas, los uniformados indagaban en sus movimientos, sobre la base del GPS de su celular, el cual le permite establecer dónde permaneció antes del desenlace.
También, colaboraban los profesionales de Ciberdelitos, buscando en fotografías y en redes sociales acerca de sus actividades, en especial amigos, compañeros de trabajo y su mundo afectivo.
Nada era pasado por alto, mucho menos descartado. Los policías confiaron que la vida de Frontera era pasada por el filtro de los expertos, en pos de un supuesto perfilado: quién era, sostenes emocionales, creencias, amigos, problemas y en especial, todo lo que hizo el sábado y domingo.
De ese pormenorizado análisis de vida, los funcionarios hoy tendrían una idea básica sobre la realidad de Frontera, al menos sábado y domingo. Ello no implica obtener las respuestas cruciales, pero aportaría un contexto, dado al triste fin que enlutó a sus seres queridos.
Una vez que los forenses concluyan la autopsia, la Fiscalía daría luz verde para la entrega del cuerpo a su familia y así reciba el último adiós.