Expolicía condenado a 9 años de prisión y al pago de $6.5 millones por la explotación sexual de una mujer
En la investigación se comprobó que captó a su víctima a través de un perfil apócrifo en redes sociales.
Un ex policía de Tucumán fue condenado a 9 años de prisión por explotar sexualmente a una mujer durante cuatro meses en 2021. En la investigación se comprobó que tiempo después del calvario que sufrió, la mujer volvió a ser captada a través de un perfil apócrifo en redes sociales.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Tucumán condenó al ex policía provincial en situación de retiro obligatorio por explotar sexualmente a una mujer entre febrero y junio de 2021.
En la denuncia se detalla que la víctima había logrado escapar a la situación de sometimiento, pero "el agente volvió perseguirla y hostigarla meses más tarde hasta que fue detenido por otros policías en el contexto de una agresión hacia la mujer".
De acuerdo a la acusación, entre los meses mencionados, "Darío Mauricio Sandoval captó a la víctima, ganándose su confianza y ofreciéndole realizar trabajos de modelaje a través de una conocida, quien resultó ser una persona ficticia inventada por él. De tal forma, mantuvo contacto telefónico con la víctima, con quien organizaron los preparativos de la oferta laboral y que luego devinieron en el servicio de acompañante o escort".
El comunicado del Ministerio Público Fiscal se detalla que el acusado "se aprovechó de su víctima mediante engaños y la explotó sexualmente de lunes a domingos, entre las 16.00 y las 23.00, lo que representaba en promedio un total de 6 u 8 'pases' diarios".
En efecto, la fiscalía evaluó en el juicio Sandoval se valió de una "ostensible situación de vulnerabilidad de la víctima, quien pasaba por una apremiante situación económica familiar junto a un problema de salud de su padre, al que le habían diagnosticado artrosis degenerativa".
El ex policía transportaba a la mujer desde su domicilio particular hasta diversos hoteles alojamiento en la capital tucumana para que mantuviera relaciones sexuales con otros hombres, quienes pagaban sumas de entre 4 mil y 5 mil pesos.
Sandoval, a través de mensajes de WhatsApp, usurpó la identidad de la víctima al utilizar fotos suyas y así pactar los encuentros.
La agresión sucedió meses después cuando el acusado utilizó un perfil falso, la contactó diciendo que se llamaba Natalia y que quería contratarla, pero después en una reunión la víctima constató que era Sandoval.
El ex policía le explicó que la había citado a través de un perfil apócrifo para decirle que "estaba arrepentido y que quería volver a trabajar con ella".
La víctima añadió en su declaración que, ante la expresión de su negativa a la propuesta, "Sandoval la amenazó con llevarla a la fuerza y subirla a su automóvil".
Es allí cuando comenzó a gritar, lo que ocasionó que el personal policial que se encontraba en el lugar tomase conocimiento de lo que estaba pasando. Durante el procedimiento al acusado se le secuestró el teléfono celular, la credencial de personal policial y la chapa de pecho de metal, la cual exhibió.
Posteriormente el imputado recuperó la libertad, pero el Juzgado Federal Nº2 de Tucumán "le prohibió acercarse a la víctima e inició una investigación al respecto. Así pudo dar con la planilla prontuarial y de antecedentes del policía, que indica que cuenta con 18 procesos iniciados en su contra por los delitos de amenazas, lesiones y abusos sexuales".
Frente a las pruebas presentadas, los jueces Enrique Lilljedah, Abelardo Basbús y Ana Carina Farías sentenciaron a Sandoval por los delitos de trata de personas con fines de explotación sexual en las fases de captación y traslado, agravado por la consumación de la explotación en perjuicio de una víctima.
Se dispuso además una reparación integral de 6,5 millones de pesos, actualizable por el Índice de Precios al Consumidor al momento del pago.