Deportivo

Con todos los detalles: así se logró el reencuentro entre la atleta Paula Salto y su hijo dado en adopción

ENTREVISTA

Paula Salto, la atleta santiagueña que corría hace ocho años mostrando una remera en la que aseguraba que buscaba a su hijo, logró su objetivo: el pasado sábado se reencontró con Sebastián y todo fue felicidad.

En diálogo exclusivo con EL LIBERAL, dio detalles de cómo ese encuentro se hizo posible.

"Todo surgió a partir de una entrevista que hice hace como tres o cuatro meses en un portal dónde conté mi historia con mi hijo Sebastián. Los amigos de él también son seguidores de esa página y sabían la historia de vida de mi hijo que es adoptado. Cuando le mandaron una imagen le contaron que había una mujer que tenía los mismos datos de él sobre la adopción, la fecha y lugar de nacimiento".

Luego prosiguió: "El domingo que fue el Maratón de Buenos Aires, al mediodía me envió un mensaje por el chat de Instagram y me avisa que tenía los mismos datos míos y que estaba seguro que él era la persona que estaba buscando. Me adjuntó el acta de nacimiento y cuando lo ví coincidía con todo lo que yo tenía en mi poder".

La charla entre la mamá atleta y su hijo Sebastián siguió luego por teléfono vía whatssap donde aprovecharon el momento para contar de sus vidas.

"Él me contó todo y yo le dije que lo estaba buscando. Me confesó que no estaba buscando sus raíces biológicas y que a lo mejor algún día lo podía hacer. Cuando se enteró de que yo lo estaba queriendo encontrar, él decidió avisarme que estaba bien para que yo dejara de buscarlo con la remera en los maratones. Durante 36 años de mi vida me levantaba pensando adonde estará".

Paula era consciente de que la situación era demasiado fuerte y que debía controlar sus impulsos al momento de encontrarse cara a cara con su hijo.

"Todo una semana estuvimos escribiéndonos solamente. No hablamos. La voz la conocí el sábado cuando nos encontramos. La única foto que tenía era del DNI y del perfil de su whatssap que tenía un perro y de su Instagram una foto de él con otro perro que se destacaba más. Ahí quedamos para el sábado. 

Antes de producirse ese momento que Paula esperó tantos años, ellos se pusieron de acuerdo en identificarse a través de la vestimenta.

"Veníamos caminando y cuando lo vi me dijo que era Sebastián. Nos abrazamos. Y estaba nerviosa, pero él no porque es muy tranquilo. Estuvimos cuatro horas hablando, tomando mate que trajo y con un termo de dos litros creo. Ahí nos contamos todo y me mostró las fotos de su álbum de cuando era bebé. Su mamá adoptiva le recordó cosas como para que me las contara a mí. Al final, quedamos en que todo debe fluir entre nosotros", resumió la mujer que encontró lo que tanto anhelaba: retomar el vínculo con su hijo.

Ir a la nota original

MáS NOTICIAS