Joven entró a robar hierros en una algodonera,  se peleó con dos policías y uno de ellos lo mató

Un cabo primero y un sargento de la policía están tras las rejas desde ayer luego de disparar en contra de un conocido joven bandeño que ingresó a sustraer hierros de la algodonera SIRLEX S.A, en el barrio Los Lagos de La Banda, mientras ellos hacían servicio adicional.

El sangriento hecho se registró cerca de las 2.40 de este jueves cuando el sargento Sebastián Cogote (45) y el cabo Primero Juan Díaz (36) cumplían servicio adicional en el predio de la Algodonera SIRLEX SA, ex Faca, en el barrio Los Lagos.

Según consta en la investigación policial y judicial, mientras se encontraban en el lugar, los uniformados notaron que dos jóvenes ingresaron al predio —previo a saltar el cerco perimetral sobre avenida 25 de Mayo— y pretendían apoderarse de barras de hierro.

En ese momento, supuestamente, los uniformados Cogote, numerario en la División Prevención de la Departamental 3, y Díaz, de la Comisaría 12, dieron la voz de alto y uno de los ladrones huyó, pero el otro los enfrentó; se trata de Yonathan "Paito" Rojas.

El delincuente se habría enfrentado con los uniformados entrando en lucha con el sargento Cogote y —supuestamente— durante un forcejo recibió un disparo que ingresó por encima de su hombro, a la altura del cuello, provocándole la muerte de inmediato.

Rápidamente fue el mismo sargento quien se trasladó hasta la Comisaría 14 y contó lo sucedido. Sus pares se presentaron en el lugar con una ambulancia. Allí los paramédicos confirmaron que "Paito" se encontraba sin vida.

El Dr. Nicolás Santillán —fiscal de turno— fue alertado del hecho por lo que ordenó que se preserve todo el lugar hasta tanto él arribe para supervisar los trabajos de rigor. Junto a él también trabajó la Dra. Natalia Saavedra, fiscal coordinadora.

Peritos de la policía Científica, el médico de Sanidad y personal del Departamento Homicidios también llegaron a la escena de la tragedia. Bajo los ojos de las autoridades judiciales se llevaron a cabo todas las tareas de rigor.

En el lugar se encontraron vainas servidas y varios proyectiles. Por orden del fiscal se secuestraron las armas de ambos uniformados que inmediatamente quedaron aprehendidos a disposición de la Justicia.

Se incautó la ropa que llevaba "Paito" así como también los uniformes de los acusados. Además se les practicó a los tres —tanto policías como víctima— el levantamiento de rastro mediante técnica stab, es decir buscar restos de pólvoras en las manos.

Con la luz del día y por más de cuatro horas, el Dr. Santillán realizó una nueva inspección ocular para analizar todo el lugar con el propósito de reconstruir cómo podría haber ocurrido el trágico hecho.

Una cámara de seguridad habría gravado toda la secuencia

Las evidencias tanto científicas como tecnológicas en este tipo de hechos son determinantes para la investigación. Pues los resultados de las mismas —en este caso análisis de material genético y cámaras de seguridad— serán claves para reconstruir el hecho.

Fuentes cercanas a la investigación informaron que el predio de la algodonera —ubicada en el barrio Los Lagos— existen cámaras de seguridad tanto externas como internas.

Según se supo, el escenario del homicidio fue captado completamente. Desde el ingreso al predio hasta el momento donde se produce el incidente. Dichas imágenes fueron secuestradas y serán minuciosamente analizadas.

También la Fiscalía ordenó que se tome declaración testimonial a vecinos de la zona que en el horario indicado habrían escuchado detonaciones, las cuales serían coincidentes con las vainas y proyectiles hallados.

"Paito", muerto, empuñaba un cuchillo en una de sus manos

Fuentes judiciales y policiales indicaron que al ingresar al lugar del homicidio, la víctima se encontraba en el piso, inmersa en un gran charco de sangre que emanaba de la lesión que tenía en su cuello.

El joven, residente en la ciudad de La Banda, conocido en el ambiente delictivo por innumerables hechos (ver nota aparte) estaba boca arriba y en una de sus manos empuñaba un cuchillo.

Una vez finalizadas todas las pruebas realizadas al cadáver, el Dr. Santillán ordenó que se secuestrara el cuchillo que empuñaba el sujeto y fuera remitido al laboratorio de genética forense junto con todas las evidencias.

La Fiscalía solicitó que se extraigan las huellas dactilares del arma blanca. Busca descartar que haya sido impuesta.

Fue condenado dos veces 

Rojas era conocido en La Banda por la cantidad de atracos que había cometido. Varios de ellos admitidos por él mismo en el año 2019 cuando fue sometido por segunda vez a un juicio abreviado y condenado.

En ese entonces "Paito" fue detenido mientras se encontraba en libertad condicional. Tras la sentencia, la Justicia lo obligó a someterse a un tratamiento para las adicciones.

Rojas gozaba de salidas transitorias y aprovechó la ocasión, escaló una tapia e ingresó a una casa del B° 25 de Mayo ampliación y se apoderó de varios bienes.

Allí fue descubierto por el dueño de la casa, quien lo atrapó y lo entregó a la policía. En ese entonces, el fiscal

José Alberto Piña —durante la audiencia de juicio abreviado— expresó que sobre Rojas pesan varios hechos delictivos, por lo que todos fueron unificados para ser condenado nuevamente.

El día 17 de agosto del 2019 "Paito" reconoció haber cometido el hecho y aceptó el acuerdo entre su abogado y la Fiscalía y fue condenado a pasar dos años en la cárcel.