El Arzobispo de la Iglesia Ortodoxa, destacó el traslado de la Sede Primada a Santiago del Estero
Mostró su orgullo de que haya un crecimiento de fieles y del trabajo pastoral de la Parroquia San Jorge en Santiago.
Monseñor Santiago El Khoury, Arzobispo Metropolitano de la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa del Patriarcado de Antioquía, en una entrevista exclusiva con EL LIBERAL, destacó la decisión del papa Francisco de trasladar a Santiago del Estero la Sede Primada.
Habló de lo que significa para la Iglesia Ortodoxa ser parte de este hecho histórico. Analizó la realidad del cristianismo en Siria y Líbano. Se refirió a la relación del cristianismo y el islamismo. Mostró su orgullo de que haya un crecimiento de fieles y del trabajo pastoral de la Parroquia San Jorge en Santiago.
- ¿Qué valor tiene la decisión del Papa Francisco del traslado del título primacial a Santiago?
El traslado de la Sede Primada a esta ciudad y la creación de la Arquidiócesis de Santiago del Estero, es una gran decisión del papa Francisco. Es un testimonio de su compromiso con la fe. El Papa Francisco, como es argentino, conoce la historia de su país.
- ¿Habló con Monseñor Vicente Bokalic?
En una conversación que he tenido con Monseñor Vicente Bokalic lo felicité por su cambio de nombramiento a Arzobispo. En aquella oportunidad, hemos podido hablar, además, sobre el camino de la fe y la contención pastoral en nuestras congregaciones.
- ¿Qué significa para la Iglesia Ortodoxa haber sido invitada a la misa de mañana sábado 7?
Hemos festejado los 110 años de nuestra iglesia (parroquia San Jorge) en Santiago del Estero. Eso significa la relación que tenemos con la Iglesia Católica Apostólica Romana. Tenemos una relación de hermandad. Por eso compartí la alegría que tiene la Iglesia Católica Apostólica Romana en Santiago del Estero con nuestros fieles en Santiago del Estero.
-¿Cómo vive el crecimiento que hay de la comunidad ortodoxa en Santiago del Estero?
Sentimos una responsabilidad más grande de cómo podemos ayudarlos, estar con ellos y hacer un trabajo pastoral más fuerte. Es un desafío para mí. Cuando tenemos una parroquia que crece, el trabajo pastoral crece también. Es nuestra misión como pastores estar con ellos, apoyarlos en sus necesidades y escucharlos en sus sueños y dificultades. Es fundamental que la iglesia sea un refugio espiritual y un lugar de encuentro para todos.
-¿En el norte argentino, como trabajan en esa misión pastoral?
En el norte de Argentina tenemos muchos fieles y en muchos lugares. Debemos cuidarlos, trabajar pastoralmente con ellos. Es un gran desafío, pero también una oportunidad para fortalecer nuestra fe y nuestra comunidad.
-¿Cómo es el trabajo de evangelización que realiza la Iglesia Ortodoxa en el mundo, pero particularmente en América Latina?
La Iglesia Ortodoxa, cuando construye los templos, construyen para guardar su fe, vivir su fe, dar la fe también a sus hijos. Cuando tenemos una parroquia viva, urgente, la evangelización siempre va a estar presente. Como Iglesia Católica Ortodoxa en Argentina, nuestro trabajo siempre es cuidar a nuestros fieles, pero si hay gente que no conocía a Jesús y quieren aceptar la fe de nuestra iglesia ortodoxa, serán siempre bienvenidos. Cada generación ha aportado algo único a nuestra comunidad, manteniendo viva nuestra fe en medio de desafíos y cambios.
-¿Cómo conviven el Cristianismo y el Islam en Medio Oriente?
Yo viví en Siria y en Líbano. Nunca he sentido ninguna diferencia. Tengo muchos amigos musulmanes. El islam, acá, no es algo nuevo para nosotros. Los cristianos vivimos años con el islam y el islam viven también con nosotros. Como pueblo, nosotros sabemos que podemos vivir juntos, sin problemas con la hermandad. Cada uno respeta las costumbres, la fe del otro.
- ¿Cómo se vive hoy el cristianismo en Siria y el Líbano?
Vivimos bien. No lo vemos como algo extraño, sino como algo natural.
- ¿El éxodo que se produce por las guerras amenaza el futuro del cristianismo?
No puedo dar respuesta a una pregunta grande, pero puedo decir que, realmente, cuando hay guerra en general, en Siria, en Líbano, en Palestina, mucha gente sale para vivir en otro país, pero como los cristianos son minoría, nosotros tenemos miedo.
- ¿Es más difícil dar esperanza a los cristianos en Siria y Líbano?
El trabajo de la iglesia, allá, es estar con la gente. Muchas veces pudimos solucionar problemas, pero también muchas veces no pudimos solucionar los problemas porque es mucho más grande que nosotros, pero la iglesia siempre tratar de estar cerca de su pueblo. Medio Oriente es la tierra de Jesús y siempre van a quedar cristianos allá.