Horror: imputan a un joven de 18 años por matar de más de 40 puñaladas a un hombre
Actuó con ensañamiento y alevosía, al emplear un arma blanca de 22 centímetros de largo.
Un joven de 18 años fue imputado como autor del crimen de un hombre de 60 que se desempeñaba como técnico en la empresa estatal INVAP, cuyo cuerpo fue hallado con signos de que fue asesinado de más de 40 puñaladas en su departamento, en la ciudad de San Carlos de Bariloche.
La fiscalía formuló cargos al joven Nicolás Roa como presunto autor del crimen de Gilberto Ceballos, mientras que además requirió la prisión preventiva del imputado.
El crimen ocurrió entre la noche del jueves 8 de agosto y la madrugada del día siguiente, en un departamento ubicado en la calle Ruiz Moreno al 100.
Según la conclusión de los fiscales, informados por el sitio dl diario Río Negro, el imputado, quien posteriormente se presentó en una dependencia policial y confesó el hecho, actuó con ensañamiento y alevosía, al emplear un arma blanca de 22 centímetros de largo.
Por el momento no se habían brindado detalles sobre las posibles causas del asesinato, aunque se supo que el imputado conocía a la víctima.
En tanto, los defensores públicos del joven no presentaron objeciones a los cargos. objeciones a la acusación realizada.
"Debemos considerar su estado anímico y mental, y hemos solicitado medidas para avanzar en nuestra teoría del caso", señaló una abogada defensora oficial.
De acuerdo con la autopsia realizada en el cuerpo de la víctima, sufrió al menos nueve cortes en el cráneo y treinta y dos lesiones cortantes y cortopunzantes en el tórax, lo que provocó una hemorragia que afectó gravemente los pulmones y el corazón, llevando a un shock hipovolémico que resultó en su muerte.
La fiscalía advirtió que "la víctima no pudo contar con auxilio inmediato durante el ataque, lo que indica que el imputado actuó con plena conciencia de lo que hacía, asegurándose de causar el daño deseado".
El equipo fiscal también destacó que Roa se presentó voluntariamente en la comisaría 2da el viernes por la tarde, donde confesó haber cometido un asesinato y desde entonces, no se produjeron "coacciones ni violación de garantías constitucionales".