Terrible filicidio en el interior de Santiago: jovencita dio a luz en su casa y "ahogó" a su beba en un fuentón
La acusada enfrenta una pena a prisión perpetua. GENERAL TABOADA
La Fiscalía solicitó este lunes prisión perpetua para una joven que el 30 de marzo del 2021 se encerró en el baño de su abuela y dos horas después abrió la puerta, con su bebé recién nacida muerta en el interior de un fuentón con agua, en Los Juríes, General Taboada.
Así lo requirieron las fiscales, Florencia Garzón y María Emilia Ganem, en los alegatos dentro del proceso que se le sigue a Anabella Barreto, sobre quien pesan cargos por "homicidio agravado por el vínculo", reprimido solo con prisión perpetua.
El tribunal está conformado por los vocales Luis Domínguez, Luis Achával y Julio Carmelo Vidal.
De acuerdo con la acusación, Barreto, de 21 años, se descompensó aquella jornada. Ingresó al baño y después pidió un fuentón con toallas. Con su familia gritando afuera, habría dado a luz y la beba pesó 3,500 kilos. Cuando permitió el ingreso de familiares, la recién nacida se encontraba muerta dentro del fuentón.
Las fiscales juzgaron ayer que Barreto obró con el propósito de provocarle la muerte. "Síndrome asfíctico", es el reproche fiscal, según su duro fundamento, sostenido en una madre filicida.
Por la absolución
A su turno, la defensa, a cargo de Pedro Orieta, señaló que en 2021 su representada no recordaba nada. Había ingerido pastillas "y también estuvo en riesgo su vida", subrayó.
"Mi asistida experimentó una urgencia o emergencia obstétrica. No es una asesina de su hija, sino una paciente que carecía del debido control médico. Es más, los remedios casi la matan. Fue rescatada sangrando en el baño", aseguró, en un extenso planteo que cerró con un pedido de absolución lisa y llana.
Para la ciencia, "emergencia obstétrica es aquel estado de salud que pone en peligro la vida de la mujer y/o al producto de la gestación y que además requiere de atención médica y/o quirúrgica de manera inmediata".
En la última audiencia, Barreto tendrá su palabra final, o no. Después, el alto cuerpo pasará a deliberar y sobrevendrá el veredicto.