Policiales

Feroz disputa por drogas entre "dealers" terminó con un joven de 31 años asesinado a quemarropa

El homicidio ocurrió cuando César Cuellar caminaba con su hermano y fue abordado por "Fama" Díaz, que se desplazaba en un auto con tres personas más, y le disparó. La Fiscalía investiga el hecho. Aún no hay detenidos. MADRUGADA SANGRIENTA El brutal ataque se registró sobre calle Laprida prolongación del barrio Los Naranjos, en La Banda. La víctima falleció en el Regional

Un nuevo asesinato conmociona la ciudad de La Banda. El cruento ataque se registró durante los últimos minutos de la noche del lunes en el barrio Los Naranjos, donde un joven fue atacado a quemarropa por su vecino.

El sangriento asesinato se conoció alrededor de la 1.30 de la madrugada del martes, cuando desde la guardia del Hospital Regional informaron que César Manuel Cuellar —de 31 años, apodado "Tenyi"— falleció a causa de un disparo que le "atravesó el pecho".

La víctima, según revelaron fuentes judiciales y policiales consultadas, había sido atacada a tiros pasadas las 23.30 en inmediaciones de calle Laprida prolongación, cuando caminaba junto con su hermano.

Si bien todo es material de investigación, fuentes cercanas a la causa indicaron a EL LIBERAL que la víctima salió de su casa con su hermano y pocos metros antes de llegar a la esquina fue abordado por su agresor, Víctor Eduardo Díaz, alias "Fama", de 35 años.

Según se supo, "Fama", domiciliado en calle Almafuerte y pasaje sin número, a una cuadra y media de la casa de la víctima, habría interceptado a Cuellar y a su hermano cuando llegaron a la esquina. El supuesto homicida circulaba a bordo de un automóvil Volkswagen Gol color rojo.

Desde el interior, el acusado —que se encontraba en compañía de al menos tres sujetos más— comenzó a realizar disparos con un arma de fuego. Sospechan que podría ser un rifle o una "tumbera".

La "lluvia de balas" desde el interior del vehículo alcanzó a "Tenyi" Cuellar, quien malherido corrió con su hermano por más de media cuadra e ingresó a la casa de su prima, ubicada a unos 70 metros de lugar. Allí cayó tendido en el suelo.

Con ayuda de familiares y vecinos, la víctima fue trasladada en remís al Centro Integral de Salud Banda, donde fue compensado. Pero a raíz de la gravedad de la herida que presentaba fue derivado de urgencia al Hospital Regional, donde ingresó al sector de urgencias. Pese al esfuerzo de los galenos, falleció pasada la 1.30 de la madrugada.

Ante la muerte del joven bandeño, la policía informó del hecho al fiscal de turno Dr. Álvaro Yagüe, quien dispuso que el cuerpo sea examinado por el médico de Sanidad. Además solicitó que personal del Departamento de Homicidios y Delitos Complejos Banda se hiciera cargo de la investigación.

Los detectives de inmediato se desplazaron hasta el lugar del crimen donde trabajaron junto con personal de Criminalística. Mientras que el cuerpo de Cuellar fue trasladado a la morgue judicial para ser sometido a autopsia.

Ya en horas de la mañana y con la luz del día, el Dr. Yagüe junto con personal de Homicidios y Delitos Complejos realizó una inspección ocular en el lugar donde ocurrió el ataque. Registraron minuciosamente todo el recorrido de la víctima junto con su hermano.

Además allí los expertos de la policía científica levantaron restos de sangres y perdigones de balas. Todo será peritado por los expertos científicos.

El proyectil le atravesó el pecho a "Tenyi" Cuellar

Fuentes cercanas a la causa revelaron que según el informe médico, la víctima arribó al Regional con una herida de bala que había ingresado "a la altura del quinto intercostal derecho, línea axilar media, con orificio de salida en la región dorsal".

El proyectil, según indicaron a EL LIBERAL atravesó el cuerpo del joven y quedó alojado entre sus prendas de vestir. Peritos de Criminalística secuestraron el plomo extraído por los médicos del Regional para ser peritados.

Si bien hasta el momento no se encontró el arma con el que Díaz y compañía agredió a Cuellar, los investigadores expresaron que la víctima tenía en su cuerpo restos de una bala calibre 22, lo que refuerza la teoría de que el disparo fue realizado con un arma de fabricación casera.

El móvil podría ser una supuesta "mexicaneada" de dinero de la venta de drogas

Si bien hasta el momento todo es materia de investigación y tanto las autoridades judiciales como policías trabajan contrarreloj para esclarecer el hecho, los uniformados barajan distintas hipótesis.

Al cierre de la presente edición, la teoría que mayor fuerza cobraba como móvil del sangriento asesinato era "un vuelto" por la venta de sustancias tóxicas.

Al parecer, según informaron fuentes vinculadas a la causa, la víctima y el agresor se dedicaban a la venta de sustancias tóxicas. Supuestamente la comercialización era "en sociedad", por lo que las ganancias debían dividirse en partes iguales.

Los investigadores manejarían la teoría de que Cuellar habría faltado al pacto que tenía con Díaz —con quien supuestamente los unía un vínculo de amistad— ya que aparentemente había realizado mal "la repartija".

Los sabuesos sostenían que el joven asesinado se habría quedado con dinero de la venta del fin de semana y por ello Díaz habría cobrado venganza. Según se supo, antes de ser herido mortalmente, Cuellar ya había mantenido una pelea con el asesino.

Hasta ahora todas son conjeturas con las que la policía trabaja y busca confirmar a través de los testimonios recolectados en cercanías de los inmuebles de los protagonistas del brutal episodio.

Una zona peligrosa por los enfrentamientos  

La calle Camino al Vivero no solo divide los barrios Independencia y Los Naranjos, sino que es la zona de "guerra" entre los "dealers" que comercializan sustancias tóxicas y pelean por el liderazgo del territorio.

En diálogo con la prensa, los vecinos contaron que "es muy preocupante la situación. Cada vez son más jóvenes las víctimas. Es increíble que pasen estas cosas. Anoche me asusté cuando escuché una verdadera balacera", sostuvo.

Según manifestó la lugareña —quien por temor a las represalias prefirió ocultar su identidad— minutos antes de la medianoche del martes se escucharon "muchísimos disparos. Pero nosotros no salimos. No vimos nada. Solo escuchamos los estruendos a través de la pared".

"El barrio está cada vez peor. No es el primer crimen que tiene que ver con el tema de las drogas y el alcohol. Hubo chicos que se ahorcaron drogados. Es algo de nunca acabar y cada vez está peor. Esto que pasó (por el crimen de Cuellar) tiene que ver con eso", refirió.

Los lugareños se mostraron temerosos de contar lo que se vive a diario en la zona, ya que si "hablan" deben "atenerse a las consecuencias". Al cierre de la presente edición, los detectives buscaban testigos del sangriento crimen.

Ir a la nota original

MáS NOTICIAS