Ambulancia y 135 kg. de cocaína con perfume de mujeres narco
Aguardan pericias. Antes, emergen charlas y fotos: una paciente amante de narco-político y una socia en el negocio de la salud y diálisis.
Dos mujeres, supuestas amantes de narcos salteños, quedaron entrampadas en diálogos telefónicos picantes, semanas previas al secuestro de una carga de 135 kilos de cocaína en ruta 16, ciudad de Monte Quemado, departamento Copo, según se deprende de fiestas nocturnas abundantes en comida y champagne.
La ambulancia fue interceptada por gendarmes en el Puesto de Control y en menos de diez minutos salió a la luz un transporte camuflado con una paciente que debía dializarse, pero adosado, bajo la camilla y con un doble piso, 129 panes de cocaína amarilla, con el sello de un delfín. El operativo fue realizado por efectivos de Gendarmería Nacional el 8 de abril y la droga estaba valuada en casi $ 2 mil millones.
Ahora, los expertos de Gendarmería y el juez Federal, Guillermo Molinari, apuran la extracción de información de los celulares incautados.
En principio, se supo que la paciente sería amante de un narco cercano a la política en un distrito salteño. A los diálogos, se le adosarían fotos en que compartieron fiestas, con una anfitriona en común: una mujer fuerte cercana al negocio de la salud y servicios de diálisis.
La fachada
Ello deja entrever inequívoca cualidad entre las dos mujeres, pero la única que cayó en desgracia fue la paciente que viajaba en la ambulancia y debía cubrir un viaje entre Salta y Buenos Aires.
Al ser indagada, prefirió el silencio. Sin embargo, se intuye que su defensa procurará enviar mensajes de colaboración y pediría ampliar su declaración en los días venideros. Muy en su interior, ambos tienen la certeza de que va derechito a un procesamiento y/o prisión preventiva.
Dentro de la misma aventura en cuatro ruedas, con una carga "gordita" de drogas, trascendió que la ambulancia fue acondicionada diez días antes de partir. Chofer, enfermero y paciente ascendieron y enfilaron hacia un taller en que les fueron incorporados los 129 panes de cocaína.
Recién entonces, pusieron primera rumbo a Buenos Aires. Entonces, cambiaron la ruta y pusieron en marcha una ruta diferente: se mandaron a la ruta 16 y cayeron en un control de gendarmes, quienes advirtieron groseros montajes en el suero adosado a la paciente, con el neto sesgo de drogas y narcos.