Añadir sal a los alimento representa mayor riesgo de enfermedad renal
La investigación destacó la importancia de reducir la frecuencia de la sal en la mesa para mitigar el riesgo. SALUD Un estudio encendió la luz de alarma
Agregar sal a los alimentos cuando ya están en el plato es pernicioso para la salud cardiovascular, pero un nuevo estudio científico de la Universidad de Tulane (EE.UU) demostró que también produce un mayor riesgo de enfermedad renal crónica. Los hallazgos sugieren que reducir la frecuencia con la que se agrega sal a los alimentos en la mesa podría ser una estrategia valiosa para reducir el riesgo de enfermedad renal crónica (ERC) en la población general. Este estudio de cohorte poblacional evaluó a los participantes del Biobanco del Reino Unido de entre 37 y 73 años, que no padecían ERC al inicio del estudio.
Los casos incidentes de ERC se definieron mediante códigos de diagnóstico. Los índices de riesgo (HR) y los IC del 95 por ciento se calcularon utilizando modelos de riesgos proporcionales de Cox.
Dentro de una cohorte de 465.288 personas, los participantes con mayor frecuencia autoinformada de agregar sal a los alimentos tenían más probabilidades de tener un índice de masa corporal más alto, una puntuación más alta en el índice de privación de Townsend y una TFGe inicial disminuida en comparación con aquellos que informaron una menor frecuencia de agregar sal a los alimentos.
Los participantes que agregaron sal a sus alimentos también tenían más probabilidades que aquellos que no lo hicieron de ser fumadores actuales y tener diabetes o enfermedades cardiovasculares al inicio del estudio. Durante un seguimiento de 11,8 años, se documentaron 22.031 incidentes de ERC.