ENTREVISTA A CLAUDIO JACQUELINE

Hoy será el día en el que Javier Milei comience a escribir su página en la historia de la política argentina cuando asuma la Presidencia.

Su discurso anticasta y de ajuste brutal que lo llevó al poder choca con sus últimas actitudes y discursos, mucho más moderado, lo que genera incertidumbre en los políticos, en analistas, periodistas, en la sociedad, incluso en quienes acompañan su proyecto.

También genera incertidumbre cómo llevará adelante una gestión cuando tiene tan poca representatividad parlamentaria y nula representación territorial. Estos temas fueron abordados por EL LIBERAL con el destacado periodista Claudio Jacquelin, prosecretario general de Redacción del diario La Nación y columnista político, quien compartió su análisis en una entrevista.

-¿Qué podemos esperar de un Presidente que se montó con un discurso tan fuerte y ahora está mostrando un perfil mucho más pragmático? Hablando con referentesde la oposición, genera incertidumbre este cambio de actitud de Milei.

-Coincido. Si lo que teníamos hasta ahora era una profunda incertidumbre por alguien que llega con dos años de ejercicio pleno de la política, con una gestión en Diputados muy pobre, con un equipo que era muy limitado y con una construcción política muy frágil, lo que sumó es con la conformación del gabinete y con sus últimas postulaciones una sensación de mucha más incertidumbre, porque es un gabinete extremadamente heterogéneo, porque los anuncios a veces parecen contradictorios con lo que él había prometido y lo que queda abierto es la ejecución de las medidas y la presentación mañana (hoy), que si además se suma que no va a ser frente a la Asamblea Legislativa, agrega un componente más de disrupción a un proceso articularmente excepcional.

-Un gesto llamativo porque buscará dar una señal anticasta, hablándole a la gente y no al Congreso,cuando después tiene que ir a arreglar con el Congreso la leyómnibus que necesita. -Sí, yo creo que ahí hay además un componente de un populismo inquietante de esa idea de que el líder habla con el pueblo sin mediación, en un país cuyo sistema es representativo y que la soberanía del pueblo se delega en precisamente la Cámara de Diputados y la representación de las provincias en el Senado. Por lo tanto, es como eludir la construcción que ha tenido el sistema en la Argentina desde la Constitución de 1860, lo cual agrega un punto más de preocupación porque se sabe que su base de sustentación es una base muy heterogénea, muy frágil y que difícilmente pueda sostener si no establece un vínculo con los representantes del pueblo y con los representantes de las provincias.

-A pesar de haber sacado un 56% de votos, tiene una nula representación territorial y legislativa muy pobre, ¿es un presidente sin poder?

-Bueno, es un presidente quetiene una legitimidad de origenindudable, lo que va a tener queconstruir es una legitimidad de ejercicio y va a tener que construir esa sustentabilidad con la relación con la ciudadanía en particular, pero también con los factores de poder y por supuesto con quienes tienen representación institucional en el Congreso. Y además articular soluciones muy rápido, de mucha complejidad, en un país con muchas demandas insatisfechas y muchas necesidades urgentes.

Esto abre un escenario de mucha preocupación, ojalá pueda concretar soluciones y que las solucionesnno sean más traumáticas de lo que ya hemos vivido.

-¿Y esas preocupaciones van por la conflictividad social que puedan generar las medidas a tomarse?

-Hay un estado de insatisfacción social, de preocupación, de empobrecimiento, de brecha económico- social que es demasiado grande y que cualquier medida que pueda afectar esas situaciones y pueda agravarlas va a generar una situación de inquietud. Además, cuando muchos de quienes son los representantes de los sectores más postergados claramente están en la oposición y ya han manifestado que van a ser opositores a cualquier medida que pueda afectar a sus representados. Por lo tanto, este es otro espacio donde se va a poner a prueba su capacidad de gestión y su gobernabilidad.

-¿Qué es lo que más inquietud genera un ejercicio del poder a cargo de Milei?

-Me preocupa, básicamente, que es una persona que no ha tenido en ningún aspecto de su vida profesional ni política conducción de equipos, que su estabilidad ha demostrado ser bastante frágil, en lo emocional particularmente, pero también en la construcción de su espacio político porque de hecho ha quedado mucha gente afuera que lo acompañó desde el incipiente origen que tiene y esto meparece que, si no tiene una visión completa de la situación compleja que abarca, si no tiene una capacidad de conducción y liderazgo que arme equipos y permita darle sustentabilidad a su gobierno, va a ser de una enorme fragilidad. Me parece que eso es lo que particularmente inquieta, sobre todo cuando lo que propone es extremadamente disruptivo y además de muchísimo impacto, casi un cambio de sentido común y de la cultura política que hemos arraigado a lo largode 40 años.

-¿Cómo será la relaciónde Milei con los medios, con el antecedente de sus fuertes reacciones ante la crítica?

-Particularmente eso me preocupa. De hecho, yo integro el forode periodismo argentino, Fopea.Hemos hecho un comunicadoafirmando la necesidad de respetarla libertad de expresión, la libertadde prensa y el acceso a la información. La intolerancia que ha mostrado, ya no solo la crítica, sino algún cuestionamiento o alguna pregunta incisiva, es uno de losnelementos que realmente nos preocupa. Nos parece que puede llegar a generar una situación que y se está viendo en otros países, sobre todo en la región, y que no sería bueno cuando el periodismo tiene un rol fundamental. Ha padecido mucho también estos últimos 20 años, pero tiene un rol fundamental como parte de los frenos y contrapesos que tiene que tener cualquier gobierno democrático y como correa transmisión con la ciudadanía. Milei no termina de comprender cuál es la función del periodismo. Milei parece que solo el periodismo que es complaciente es periodismo cuando justamentelo que no es el periodismo. Por lo tanto, a mí me preocupa seriamente que no tenga la comprensión de cuál es el rol del periodismo en una democracia