Felipe Martínez Carbonell aterroriza Hollywood con sus cortometrajes “Retrato imaginario” y “Perseguidos”
Los filmes, que rodó en su Rosario natal y con actores argentinos, fueron adquiridos por Cinedigm, compañía estadounidense que maneja una gran audiencia a través de sus múltiples plataformas de video on demand.
El director y productor de cine rosarino, Felipe Martínez Carbonell, tocó el cielo con las manos cuando sus cortos “Retrato imaginario” y “Perseguidos” fueron adquiridos por Cinedigm, compañía estadounidense que maneja una gran audiencia a través de sus múltiples plataformas de video on demand.
Actualmente, Martínez Carbonell, quien además edita y escribe sus filmes, vive y trabaja en Estados Unidos (entre Los Ángeles y Miami) donde tiene su productora Hemisferio Films con la cual produce cine y publicidad. Hemisferio Films es una productora de cine multicultural, una agencia creativa de servicio completo y un estudio de diseño.
El cineasta rosarino tiene un estilo definido. Sus películas trasladan a un mundo diferente creando un clima de detalles y entornos llenos de fantasía. En la estética de sus películas se tiene en cuenta hasta el más mínimo detalle. La forma en que se conecta con los actores y con cada miembro del equipo técnico le ayuda a lograr su punto de vista único.
Fue en Rosario, Argentina, donde desarrolló su pasión por el cine y la publicidad. Su formación artística en artes plásticas, literatura, escultura y diseño hacen una gran combinación para su estilo único como Director de Cine.
Desde su infancia, las películas han sido su pasión, así como las artes plásticas, la escultura, la literatura y el diseño. Proveniente de una familia que siempre estuvo relacionada con la cultura, Felipe creció rodeado de pinturas, museos, obras de teatro, cine y artistas.
Pérez Celis, un prestigioso artista plástico argentino de reconocimiento internacional, y amigo de su familia, quedó impresionado cuando vio una de las obras de arte de Felipe. La misma respuesta tuvieron otros artistas, incluida la novelista Alma Maritano, por la forma en que escribió novelas a una edad muy temprana. Y la artista plástica Beatriz Vettori, quien con una cámara captó a Felipe en pleno proceso creativo.
Pero todo eso quedó atrás cuando Felipe descubrió la cámara de video de su padre a los 12 años. En ese momento, decidió centrarse en el cine. A los 18 años fue a la Escuela Provincial de Cine y Televisión de Rosario (EPCTV) para estudiar Producción de Cine y Televisión y se graduó en el 2012.
En el 2012 Felipe comenzó a trabajar en sus propios proyectos, lo que le permitió formar su propia productora audiovisual: Hemisferio Films.
Su primer cortometraje "Llantos" fue seleccionado por la Federación de Escuelas de Imagen y Sonido de Latinoamérica (FEISAL) para ser proyectado en Latinoamérica. Tenía sólo veintitrés años.
En el 2013 produjo, dirigió, escribió y editó su segundo cortometraje "Momento". En el que recibió el apoyo del artista plástico rosarino Dante Taparelli con una introducción a lo sobrenatural. Este trabajo, ganó en la terna Mejor Cortometraje en el Festival de Cine Latinoamericano de Video de Rosario; por su enfoque innovador del género fantástico, por su estructura coral y episódica original, y por sus logros formales y narrativos.
TRAYECTORIA EN ESTADOS UNIDOS
En el 2014, se mudó a Estados Unidos y siguió formándose. Allí logró el título en Producción de Cine en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA). Posteriormente, trabajó para productoras de cine como Defiant Pictures en Beverly Hills y Underground Films en Hollywood.
En Underground Films se encargó de hacer “script coverage” que consiste en leer guiones de cine y tener que analizarlos frente a los ejecutivos como Trevor Engelson.
También tuvo la oportunidad de trabajar con directores de cine como Daniel Farrands (“Halloween 6”) y Gabriela Tagliavini (“Christmas with you” - Netflix).
En el 2015, Hemisferio Films consiguió a Defiant Picture como cliente. Felipe y su equipo trabajaron como productor, director y editor para el detrás de escena junto a estrellas reconocidas a nivel mundial en peliculas como Dear Dictator (protagonizada por Michael Cain y Katie Holmes); The Haunting of Sharon Tate (con Hillary Duff); The Amityville Murders (con Burt Young); Wild Oats (con Jessica Lange, Shirley MacLaine y Demi Moore); The Murder of Nicole Brown Simpson (con Mena Suvari); High Holiday (con Tom Arnold) y Grace and Grit (con Frances Fisher). Hemisferio Films también ofreció servicios de diseño y fotografía para estas producciones.
Con su productora Hemisferio Films en Estados Unidos tuvo la oportunidad de trabajar con una variedad de clientes. Por ejemplo, la agencia de publicidad "Acento Advertising" en Santa Mónica para realizar comerciales y videos de animación para varios clientes entre ellos realizó seis comerciales live-action y más de quince comerciales animados para “Banner Health” uno de los sistemas de atención médica más grandes de Estados Unidos.
“RETRATO IMAGINARIO”
“Retrato Imaginario” es un cortometraje de 15 minutos de fantasía, drama, terror y suspenso. En resumen, la trama presenta a una joven artista con cierto desequilibrio mental quien se conecta con su difunta madre por medio de la creación de un retrato familiar para liberarse de los abusos que su padre y su abuelo ejercen sobre ella. Conjuntamente, la temática de este film es sobre el poder que tiene el arte de liberar y cambiar vidas. Felipe Martínez Carbonell se inspiró en la lucha de la mujer y en movimientos como Me Too en Estados Unidos y Ni Una Menos en Argentina.
“PERSEGUIDOS”
En el 2022 dirigió, escribió y editó otro cortometraje producido por Hemisferio Films llamado Perseguidos, un cortometraje de suspenso, drama y terror de 12 minutos. Trata sobre Gabriela, una joven psiquiatra que comienza a perseguir a su paciente Javier cuando le cuenta que algo no humano le quiere robar un bolso lleno de dinero que encontró. Gabriela se ve controlada por la avaricia y termina atrapada en una situación en la que no podrá salir. Quería contar una historia de terror diferente a la que uno está acostumbrado. No quería provocar el famoso “Jump scare” donde uno salta del asiento porque algo aparece de repente. Quiero que el terror provenga de la situación en la que se encuentra el espectador. Un terror más intelectual pero no aburrido. Un terror que provenga de nuestras emociones y no intuitivo.