Fijan 300 días de pulsera electrónica para un violento de Quimilí que amenazó y agredió a su ex pareja
La Justicia le impuso ayer 300 días de pulsera electrónica a un jornalero de la ciudad de Quimilí, departamento Moreno, al concederle la excarcelación tras dos graves hechos que incluyeron amenazas y agresión f í s i c a en perjuicio de su ex pareja.
Así lo dispuso la jueza de Género, Cecilia Laportilla, al otorgarle la libertad a Ladislao Letonai, con residencia en Bº Luján de Quimilí, imputado por “amenazas” y “lesiones leves calificadas” en perjuicio de su expareja, según la investigación que impulsa la fiscal Judith Díaz.
De acuerdo con las denuncias, el sujeto abandonó su hogar en septiembre y después intentó retornar, pero ya era tarde porque su pareja, con quien tiene una hija adolescente, impuso el fin de la relación.
Desde entonces, el sujeto se habría tornado agresivo y protagonizó dos escándalos, con acusaciones de infidelidad y una posterior agresión física, por la cual los forenses fijaron 21 días de curación para la víctima.
Con más de 20 días preso, la Fiscalía y la defensa, a cargo de Nuria Kippes, acudieron a audiencia, con fines diametralmente opuestos: la Fiscalía, por más días de detención y Kippes, ávida de la libertad de Letonai.
En el debate, las partes analizaron la viabilidad de que Letonai representara un riesgo para la ex pareja, posibilidad que Kippes descartó de plano. “Mi representado mantendrá la distancia que la Justicia disponga respecto de la damnificada; lo más sustancioso, la Fiscalía ya tiene las pruebas para el proceso y mi cliente no interferirá en la causa, mucho menos con los testigos...”
Ante ese escenario dibujado por la defensa, la magistrada dio luz verde al a libertad, pero con especial atención en la letra chica. Letonai deberá llevar puesta una pulsera electrónica durante 300 días; no puede acercarse a la víctima bajo ningún concepto; tampoco debe contactarla. Asimismo, iniciará un tratamiento en la Etav y en la Digaia, organismos facultados para ayudarlo contra la adicción, y/o violencia. Si Letonai se aleja un punto de lo subrayado por Laportilla, su libertad se tornará frágil.