Nancy Ábalos, en el nombre del padre
Nuevo espectáculo en el que ejecuta clásicos de dos géneros arraigados en los argentinos. Los temas de su padre y también de Horacio Salgán, Héctor Stamponi, Atahualpa Yupanqui y el “Mono” Villegas.
Nancy Ábalos, hija del gran pianista y compositor santiagueño Adolfo Ábalos que fuera puntal del popular grupo folclórico compartido con sus hermanos, presentará el viernes 14 en Buenos Aires su nuevo espectáculo “Entre tangos y chacareras” gracias a que, destaca, tuvo “la suerte de mamar desde la cuna esta amplitud musical y expresiva”.
“La genialidad musical de mi padre, Adolfo Ábalos, sumada a la de entrañables amigos como Horacio Salgán, Héctor Stamponi, Atahualpa Yupanqui, el “Mono” Villegas, Mario Francini, Jaime Torres, Ubaldo De Lío y tantos otros que compartían veladas musicales en nuestro hogar, nos permitió a mis hermanos y a mí disfrutar y aprender sin la barrera de los géneros”, evoca Nancy en charla con Télam.
En el mismo sentido, la artista apunta que “aunque el folclore criollo y el tango tengan una identidad contextualizada a un determinado paisaje, a una forma de vida particular, tienen en común que son formas de expresar la argentinidad y esa conexión que el artista tiene con su pueblo, y que ya sea por herencia, raíces o intercambios, a mí me representan y me dan pertenencia”.
La cantante, percusionista, bailarina y compositora actuará el 14 junto a Carlos Irigoyen (guitarra) Gabriel Luna (piano) y Raúl Gutta (percusión), con Barbarita Palacios y su hija Rocío Sanjurjo Ábalos como invitadas.
-¿Cuánto te brindó y cuánto te pesó en términos artísticos ser hija de una figura de la talla de Adolfo Ábalos?
Con el apellido Ábalos convivo agradecidamente ya que es parte de mi herencia artística. Es una excelente carta de presentación y me siento muy cómoda con ello. Siempre recibo el reconocimiento y el cariño de quienes conocieron a los Ábalos y me hacen sentir ese afecto sincero por, de alguna manera, continuar ese legado.
El plus de ser hija de Adolfo, tan reconocido por sus pares músicos de todos los géneros, me agranda más la responsabilidad de dar todo lo mejor. Adolfo Ábalos es un referente permanente para quienes quieren conocer las bases de nuestra música criolla norteña, en el piano fue un gran renovador y pionero en su manera de tocar nuestros ritmos y sus obras son himnos de la música santiagueña.
Aún en países muy lejanos y exóticos para nuestra cultura, como Vietnam, en donde tuve la suerte de hacer gira cinco veces, el formar parte de una familia que ha dejado una huella profunda en la historia de la cultura popular de un pueblo, ya es una vía de entrada maravillosa y que como primera impresión genera respeto. Luego en la cancha se ven los pingos.
-¿Cómo nace “Entre tangos y chacareras”?
El espectáculo nace de mi necesidad de hacer un concierto con un recorrido musical variado con el cual me identifico, diferente al tipo de repertorio que en otros espacios donde el contexto es más apropiado ya sea para el folclore o el tango, por eso va a incluir temas folclóricos propios (chacareras, gato, cueca), tangos de mi padre y por supuesto varios de sus infaltables clásicos folclóricos. También algún candombe de Egle Martin, piezas de Armando Tejada Gómez, otros temas del folclore latinoamericano y tangos clásicos de grandes referentes del género.
EJERCE LA DOCENCIA
“La danza forma parte de mi esencia”
-¿Siempre fue natural aplicar tus saberes como música y bailarina?
Desde la infancia incorporé esos conocimientos y prácticas de manera integral y asumo que nuestra música folclórica, incluyendo al tango, son danzas. En la escuela secundaria artística me recibí de maestra nacional de danzas folclóricas y hasta el día de hoy enseño y me encanta bailar. La danza forma parte de mi esencia.