Se reanuda el juicio por el crimen de Marito con los últimos testigos
Declararían alrededor de diez testigos de la causa y sería la última semana de esta etapa, para dar lugar a los alegatos de clausura.
El juicio oral por el crimen de Marito Salto, el niño de 11 años que fue asesinado en Quimilí, en junio del 2016, se reanudará este martes para resolver una serie de planteos realizados por los abogados defensores de los sospechosos y de acuerdo con lo que se resuelva, continuaría con la declaración de los últimos testigos.
El debate sufrió un parate obligado por la Feria Judicial de invierno, pero este martes está previsto que las partes se den cita en el Palacio de Tribunales para continuar con las audiencias.
Cabe señalar que el Dr. Miguel Torres, abogado de Rodolfo Sequeira, había formulado una recusación contra el Tribunal de Juicio Oral que está llevando adelante el proceso –integrado por los Dres. Alfredo Pérez Gallardo (presidente), Daniela Campos Nittinger y Luis Domínguez-, pero la recusación fue rechazada por un tribunal conformado para analizar el recurso.
Este martes, cuando se encuentren de nuevo las partes, se resolvería sobre una serie de nulidades planteadas con posteridad y en caso de ser rechazadas, se continuará con el debate y desfilarán los últimos diez testigos.
Se prevé que el martes, miércoles y jueves se finalizará con la etapa de testimonios, para dar lugar que las partes preparen sus alegatos de clausura, los que tendrán lugar seguramente a finales de agosto y luego recién el Tribunal dará a conocer su veredicto sobre los acusados.
Son nueve los acusados por el macabro asesinato
En el proceso están acusados Miguel Jiménez y Rodolfo Sequeira, como autores materiales del "homicidio triplemente calificado por alevosía, ensañamiento y el concurso por haber sido premeditado por dos o más personas, privación ilegítima de la libertad y abuso sexual con acceso carnal en concurso real de delitos".
Ramón Rodríguez y Daniel Sosa, están acusados como "partícipes necesarios". Le siguen (libres) Daniel Gastón y Ramón Ocaranza; María Eugenia Montes, Gustavo Hernández y Pablo Roberto Ramírez, por "encubrimiento agravado".
La teoría del caso de la Fiscalía es que Marito fue asesinado en el marco de un crimen ritual y su elección no fue al azar.
Durante allanamientos que se concretaron en 2017, se secuestraron manuscritos y símbolos que dan cuenta de rituales y que los sospechosos podrían haber integrado una secta o practicar un culto.