“Sin ti no puedo”: Thriller liviano con espíritu de culebrón
Por Heraldo Pastor. Especial para EL LIBERAL.
Podríamos sintetizar diciendo que este film de la realizadora española Chus Gutiérrez, quien tiene una larga experiencia tras las cámaras, es un thriller muy liviano. Si bien es una coproducción hispanomexicana, es curioso que en la trama se introduzcan dos personajes mexicanos (“me encanta tu acento”, le dicen a uno de estos) y, paralelamente, como si portaran con ellos el espíritu del relato popular latinoamericano, el policial de enigma que es básicamente “Sin ti no puedo” se impregna del rebuscamiento característico del culebrón más típico.
Blanca acaba de salir de prisión
Blanca acaba de salir de prisión luego de ocho años de condena por haber sido acusada de provocar un incendio en el que falleció parte de su familia. A su regreso, quiere rehacer la relación con su hermano David (sobreviviente de la tragedia), quien vive con su novio Álex. David está muy resentido con ella; algo oscuro ha ocurrido la fatídica noche del siniestro (la narración va de a poco aportando indicios, sembrando dudas típicas del género); de modo que a ella le resultará complicado lograr su cometido.
Pero estamos -ya lo dijimos- en el terreno del melodrama televisivo, que privilegia la emotividad: lo verosímil no importa, los personajes se comportan de manera ilógica, al villano las cosas les resultan fáciles, los ambientes son suntuosos, los actores son bonitos (Alfonso Bassave parece estar obligado por contrato a mostrar en todas sus actuaciones su cinturita ûmaldito élû y sus glúteos firmes), hay escenas “hot”, celos, venganza, intriga, pasión, etc.
“Home invasion”
Hay algo de “home invasion” en el desarrollo de la trama; y vendrá el consabido giro / revelación final; pero -lo dicho- es un espectáculo muy liviano (ni para el afiche se esmeraron demasiado), en el que más vale quedarse con lo superficial (las florituras), porque en el fondo es muy rebuscada, solo apta para aficionados a la telenovela.