Dr. Raúl Monti, secretario de Salud de la Provincia: “Ojalá estemos a la altura de las circunstancias, eso lo dirá la historia de esta pandemia cuando se escriba”

E l 14 de marzo, en Selva se contaminan dos personas con alguien que había venido de España y comienza para nosotros el ingreso a nuestra provincia de pacientes contaminados. Ese momento no teníamos circulación comunitaria, y nosotros estábamos trabajando desde enero en lo que es la organización, motivo por el cual, el hecho de que Selva haya sido la primera ciudad, hizo que nos pusiéramos de alerta. Se cerró esa población de casi 4000 habitantes, personalmente estuve junto al intendente durante toda una semana, hasta que se organizó el aislamiento. Se comenzó a decirle a la gente por qué se la encerraba, por todos los medios a disposición, hasta con una propaladora en un carrito.

Así tuvimos la primera experiencia dentro de la provincia, y esto fue así marzo, abril, mayo, junio y julio. El 2 de agosto, con 40 casos en la provincia, nos dedicamos durante todo ese tiempo a organizar nuestros hospitales públicos, con una gran inversión económica de parte de la provincia y de la nación finalizaron tres terapias intensivas, la del Hospital Independencia, con ocho camas, la del “Gumersindo Sayago” con 10 camas, el hospital “Mama Antula” con 20, y 128 camas de la vieja terapia intensiva del Hospital Regional, más cada uno de los lugares con centros de aislamiento.

También es de destacar que el Nodo fue el primer centro de aislamiento preventivo con 400 camas, cuando comenzaron a llegar los trabajadores rurales, que fueron cerca de 12.000 migrantes en la provincia, de las que pasaron por el Nodo unas 8.000 personas. Ahí recibieron todas las atenciones ya que se montó un operativo junto con el Ejército, que tenía en detalle de la atención dentro del lugar. Allí se llegó a tener unas 300 camas ocupadas en su momento.

Ese centro se convirtió después en un lugar de aislamiento para positivos, cuando los otros hospitales tuvieron que descargar con gente que no tenía cómo hacer el aislamiento en su domicilio.

El “caso 41”

Ese fue un tiempo bueno, porque pudimos aprestar al personal de salud y a quienes acompañaban, para que entendieran cuáles eran las conductas. Se armaron el Comité Operativo de Emergencia (COE) y el Centro de Operaciones de Emergencia, y pudimos desandar toda esta etapa hasta el “caso 41” que apareció el 2 de agosto, después e haber migrado entre Santiago y La Banda por muchos domicilios, contagió aproximadamente a 120 personas y esas 120 se multiplicaron por tres, y vivimos otra etapa que fue la transmisión comunitaria.

En el conglomerado Capital y La Banda se produjo el mayor número de contagiados, se redujeron nuevamente los horarios, cuando habíamos logrado una fase 5, y así, durante dos meses logramos los resultados que aún hoy estamos viviendo.

En noviembre comenzamos una disminución del pico de casos que habíamos tenido en septiembre, sobre una meseta que llegamos aproximadamente a los 14.000 contagiados. Entre estos hubo un porcentaje importante de pacientes comórbidos y adultos que fallecieron dentro de la terapia intensiva; llegamos a tener el 87% de las camas ocupadas en terapia a mediados de noviembre, con todo un sistema de salud cansado.

Para los primeros días de diciembre comenzó a bajar esta meseta, y hoy tenemos un promedio de 30 casos por semana, cuando habíamos tenido 200, 250, hasta 300 casos semanales. Estas medidas son las que permitieron la reapertura del transporte, los bares, los comercios, en forma gradual, y con protocolos… o sea, comenzamos a funcionar, y esto debía ser así porque esta es nuestra nueva realidad.

Siempre con una luz al final del túnel, en julio, cuando se interpretaba que habría vacuna, vivimos todo este tiempo y así llegamos a diciembre, cuando la vacuna ya está.

Ojalá hayamos estado a la altura de las circunstancias, eso lo dirá la historia. Nosotros no tenemos tiempo de avaluar, pero sabemos que todos los que nos pusimos a trabajar lo hicimos todos los días, tratamos de cometer los mínimos errores, que los tuvimos; tuvimos siempre el apoyo del gobernador que se ha portado como un soldado de la salud, fue el motor de todo esto.