Joven madre que fue con su hijo a fiesta privada resultó abusada

Una joven madre asistió a una fiesta prohibida en Beltrán, departamento Robles, acompañada por su pequeño hijo y al día siguiente habría despertado en la cama de una habitación distante de los invitados, con un comerciante abusándola y otro filmándolo todo.

Por donde se la contemple, la historia conllevaría dos hechos inequívocos: el presunto vejamen sexual y la violación a las normas legales en torno de las medidas preventivas por el Covid-19.

Según la investigación que impulsa la fiscal Alicia Falcione, el ataque habría sido perpetrado la madrugada del 20 de septiembre en una casa de familia, a la que asistieron jóvenes de Beltrán, otros de la ciudad de La Banda y de la ciudad Capital.

Entre los invitados se encontraban un comerciante de capital y la joven madre, quien residiría en Beltrán, añadieron los voceros policiales. “Mi hijo dormía en una habitación. Lo fui a ver y me crucé con él (en alusión al acusado) en un pasillo. Después no recuerdo casi nada. Sólo sé que desperté al otro día en una pieza y con un tipo arriba mío”, habría relatado la joven ante la policía de Beltrán.

Por ende, la joven habría reconocido haber bebido cervezas en exceso y sugerido que tal vez le pusieron alguna pastilla en el alcohol. La denuncia fue interpuesta el 21 de septiembre por presunto “abuso sexual con acceso carnal” y representada por el abogado Javier Leiva, agregaron las fuentes judiciales a EL LIBERAL.

Sin perder tiempo, la fiscal Alicia Falcione ya puso manos a la obra y habría solicitado hisopados, secuestro de vestimenta y, por lógica, testimoniales de todos los invitados.

Allí radica la principal valla de la funcionaria. En derribar o sortear el “pacto de silencio” de 18 personas, resueltas en negar haber participado de la fiesta alcohólica, a sabiendas que del otro lado de la denuncia a ellos les tocará una segura imputación, acusados de vulnerar el artículo Nº 205 del Código Penal.