Alertan por una enfermedad dérmica que afecta principalmente a adultos jóvenes
Se trata de una enfermedad del epitelio folicular caracterizada por abscesos recurrentes, fístulas drenantes y cicatrices.
Mañana, 6 de junio, la comunidad médica conmemora el Día Mundial de la Hidradenitis Supurativa (HS), una enfermedad común de la piel con una prevalencia estimada de aproximadamente un 1 %, y que al tratarse de una enfermedad crónica, es fundamental las visitas al médico para la continuidad del tratamiento.
La HS suele aparecer en adultos jóvenes, en los primeros años de la segunda década de vida, aunque puede surgir a cualquier edad. La prevalencia disminuye habitualmente después de los 50-55 años.
Respecto de esta enfermedad, la doctora Aldana Scaglione, dermatóloga santiagueña, comentó que “no es una afección muy corriente en la consulta diaria”, y alertó que “muchos pacientes no consultan o consultaron pero no continúan controlándose”.
“Al ser una enfermedad crónica es fundamental las visitas al médico para la continuidad del tratamiento”, enfatizó.
Sobre algunas características de esta enfermedad, comentó que hay cierta influencia ambiental como los “climas cálidos y húmedos”, y destacó la importancia de realizar una consulta al médico.
“Es que la mayoría de las veces existe relación con el síndrome metabólico, en especial el sobrepeso; el hábito de fumar; alteraciones hormonales, y a veces coexiste con otras enfermedades como artritis o psoriasis. Es fundamental hacer estudios de sangre y ecográficos más que nada para evaluar la enfermedad y así poder tratarla en forma integral”, precisó.
Síntomas y aspectos de la patología
Según la Sociedad Argentina de Dermatología, algunos de los síntomas de la hidradenitis supurativa, son la aparición de bultos dolorosos localizados en axilas, ingles, glúteos y bajo el pecho; cicatrices que suelen aparecer por lesiones repetidas en una misma zona, y supuración de abscesos dolorosos.
Es diagnosticada erróneamente con frecuencia y muchas personas con HS no siempre se sienten cómodas al hablar de sus síntomas o solicitar ayuda al dermatólogo; el número de personas diagnosticadas es realmente mucho menor del número de personas que se cree que podrían sufrirla.
Las mujeres tienen más probabilidades de padecerla que los hombres, y un diagnóstico y tratamiento temprano es fundamental, para no desarrollar complicaciones significativas.l