Respeto por la vida y firmeza sincera
Por María Rosa Barbarán. Decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Ucse
Como ciudadana de esta querida provincia y de este maravilloso país celebro el tiempo que vivimos, tiempo de democracia y grandes desafíos para seguir construyendo un Estado que crezca en madurez ciudadana.
Al mismo tiempo me preocupan, a veces angustiosamente, las dificultades, incertidumbres, temores, violencias, diferencias irreconciliables, prácticas indebidas y voluntades muchas veces esclavas de intereses que solo buscan la división entre conciudadanos, vecinos, familia, compañeros de trabajo y hasta entre amigos.
Pero como sabemos, los tiempos de crisis son siempre tiempos de oportunidades, y por qué no también de conductas con cierta cuota de heroísmo, en cuanto valentía y decisión para seguir participando aun en medio de esas dificultades o adversidades.
Hay tanto por hacer… y pensémoslo con el más cercano, en el lugar en el cual nos desempeñamos, y tengamos el coraje de animarnos a pensar y crear alternativas pequeñas, puntuales, válidas y útiles allí donde nos toca estar.
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Aliento y acción consciente, impulso positivo y propuestas que aporten soluciones. Y que las podamos pensar y construir superando egoísmos e individualidades que ya nos han llevado a tantos desaciertos. Ya no hay lugar para protagonismos solitarios, necesitamos la capacidad interior para pensar, construir, elaborar y llevar adelante respuestas concretas y en redes.
Podremos mejorar solo desde la generosidad de salir y movernos de nuestras zonas de comodidad y por ejemplo en esta democracia que hay que seguir cuidando, estar más cerca de quienes han sido elegidos para representarnos. A ellos hemos confiado nuestra voz, nuestro clamor, necesidades, preocupaciones, pero también estamos comprometidos a acercarles propuestas y voluntades de sumar a su tarea también con nuestro trabajo.
Y en este sentido hoy en Santiago del Estero podemos aportar para sumar. Los temas son muchos y diversos, pero en particular nos preocupan los de fondo, como el de la defensa de la vida.
Es justo destacar que seguiremos confiando en nuestros representantes que ya se han manifestado valiente y coherentemente el año pasado en defensa de la Vida. Aquí proponemos por ejemplo, trabajar en una propuesta de ley que supere algunas discusiones existentes y proponga la protección de la vida del concebido y de los derechos de la mujer embarazada (propuesta que ya cuenta con interesantes antecedentes), desde una visión que respete la vida humana de forma integral, y atienda necesidades concretas que enfrentan las mujeres embarazadas frente al drama del aborto.
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Sabemos que en esta nueva etapa se volverán a poner en discusión, aun lo ya discutido de manera amplia y enriquecedora el año pasado. Pero estamos seguros y confiados en que los argumentos oportunamente sostenidos, jurídicos, médicos, éticos seguirán siendo los rectores de nuestra voz como ciudadanos de esta provincia que decide defender la Vida desde la concepción hasta la muerte natural.
Y esto significa también estar dispuestos a sumar esfuerzo, compromiso y mucho trabajo para abordar situaciones y condiciones aun de gran precariedad de la vida de muchas familias en nuestra provincia. Seguir aportando a cuidar lo ya logrado, luchar por lo aún pendiente en materia de asistencia, derechos y deberes, educación, salud, economía familiar, trabajo, producción, bienestar integral.
La salud pública en cuanto promoción de estilos de vida saludables, campañas de concientización, prevención, promoción y protección de la salud integral, junto a la educación y la investigación al servicio de las realidades de nuestras poblaciones, serán algunos de los ámbitos concretos donde poder sumar nuestros aportes y trabajo. Abriendo espacios de contención, escucha y acompañamiento, prioritariamente a niños, adolescentes, jóvenes y familias en situaciones de mayor necesidad, en donde la vida esté amenazada.
Nuestra cultura de solidaridad, capacidades, acogida, encuentro y alegría compartida nos alientan a enfrentar juntos los tiempos que vivimos. No caigamos en la tentación del desánimo y juntos sumemos para seguir mejorando la calidad de vida en nuestra querida provincia. l