Una cajera y su novio, presos por el asalto al local de Megatone
Recuperaron casi la mitad del botín. El dinero restante habría sido “pagado” a narcos de Tucumán por uno de los acusados.
Una empleada y su novio tucumano son los únicos detenidos y principales sospechosos de haber pergeñado el asalto a dos trabajadores de la firma Megatone, sucursal Añatuya, que se dirigían a realizar un depósito bancario y que fueron despojados de un maletín con más de medio millón de pesos.
De acuerdo con lo manifestado por las fuentes, la Policía y la Fiscalía continuaban anoche trabajando en busca de mayores elementos y no descartaban que haya más involucrados.
En menos de 24 horas después del asalto a los dos empleados de apellido Batalla y Farías, que fueron interceptados a unos 50 metros de la sucursal del comercio en el que trabajan por dos “motochorros” que con sus cascos colocados, los habrían amenazado y arrebatado un maletín con $530.000, los funcionarios policiales lograron identificar a dos sospechosos.
La primera en ser detenida fue una joven identificada como Lucrecia Díaz, la cual sería cajera en el local de Megatone y habría sido la que contaba con la información de que el lunes a primera hora, se realizaría el depósito de la recaudación del fin de semana.
Los investigadores habrían descubierto mensajes en su celular, que intercambiaba con un hombre identificado como de apellido Páez, el cual sería oriundo de Tucumán.
Las mismas fuentes deslizaron que la cajera y el tucumano habrían mantenido una relación sentimental. En los mensajes, habría evidencia de que planificaron el robo.
La Policía también habría demorado al joven que acompañó a Páez en el asalto, pero las fuentes apuntaron que la fiscal, Dra. Andrea Darwich, dispuso que recupere su libertad -continúa ligado al proceso- ya que el tucumano habría admitido que éste no sabía nada sobre el “plan”.
En el allanamiento a la vivienda del tucumano, la Policía secuestró $220.000 en efectivo.
Al ser interrogado sobre el resto del botín, éste habría deslizado que ya lo había gastado.
Pese al hermetismo en la causa, los policías barajaban la hipótesis de que Páez había escapado de su provincia agobiado por presuntos narcos con los que mantenía una deuda y estaba amenazado, por lo que habría cometido el asalto para pagarles una cifra que superaría los $200 mil.
Anoche continuaban trabajando los investigadores para corroborar las versiones. En las próximas horas los dos detenidos serán indagados. No descartan que haya más implicados.