Guardaparque nacional reveló estrategias para tratar de generar conciencia ambiental
Experiencia. Álvaro Alzogaray, ex intendente del Parque Nacional Copo.
El ex intendente del Parque Nacional Copo (PNC), Álvaro Alzogaray, consideró como las dos estrategias principales para evitar la caza y la pesca furtiva la presencia preventiva y disuasoria de personal de los diferentes organismos del Estado en los lugares estratégicos donde se desarrollan estas prácticas, además de inculcar una conciencia ecologista a través de contenidos específicos en las currículas escolares, aunque reconoció que se trata de un trabajo “a muy largo plazo”.
El guardaparque de profesión, pero ya retirado de la actividad y actualmente residente en su provincia natal de Salta, accedió a una entrevista con EL LIBERAL en la que recordó algunas de las intervenciones a lo largo de su gestión al frente del PNC, cuando tuvo que resolver numerosos casos de caza furtiva en los límites del área protegida y en la zona de amortiguamiento que rodea al parque.
Relató por ejemplo el más grande de los operativos desarrollados allí, cuando rescataron más de 40 pecaríes de collar de distintos tamaños “que habían atrapado atrayéndolos con un rastro de maíz, hasta un cerco hecho con tela metálica, y que ya estaban dispuestos para ser destinados a cotos de caza” y que “más tarde fueron liberados; eso fue por el año 2004 aproximadamente”.
Concientización
Acerca de la tarea de generar conciencia ambiental y respeto por la flora y fauna autóctonas, destacó el trabajo realizado con el Colegio Agrotécnico de Los Pirpintos de la zona de influencia del Parque Nacional, con cuyas autoridades firmaron un acuerdo para la implenetación de una materia específica, Flora y Fauna Santiagueña, que se comenzó a dictar en un curso de secundario primero y luego en dos. Incluso estos alumnos lograron importantes premios en la Feria de Ciencias nacional, con la presentación de destacados proyectos, como uno orientado a la protección del yaguareté.
“Esto se logró por un acuerdo previo de Parques Nacionales con el Banco Mundial, que financiaba un proyecto GEF”, para lograr este tipo de educación y otras prácticas de extensión e inserción social con perfil conservacionista, refirió Alzogaray.
“Gracias a ese acuerdo, Pampa de los Guanacos tiene actualmente media docena de guardaparques, que son jóvenes del lugar que sintieron la vocación por trabajar en el campo de la preservación, que se recibieron en un instituto específico para esta carrera que funciona en la localidad de San Pedro, en la provincia de Misiones”, ponderó.