Entre el posible suicidio y la tentativa de femicidio
Érika Galván, la joven que tuvo que ser internada de urgencia tras sufrir una herida de un disparo de arma de fuego en el abdomen, permanecía anoche internada con pronóstico reservado. Paralelamente, su ex pareja, el funcionario policial, continuaba privado de la libertad y el lunes se resolvería su situación procesal.
Hasta anoche aún había numerosos interrogantes en torno al incidente que se registró puertas adentro de la vivienda ubicada en la esquina de Garibaldi y Brandsen del barrio Ramón Carillo.
La joven de 24 años y madre de dos niños, tuvo que ser sometida a una cirugía, ya que el proyectil 9 mm ingresó por el abdomen bajo, perforó el intestino grueso y salió por la espalda.
Los médicos informaron que su cuadro aún era complejo, y que las zonas dañadas obligaban a un constante monitoreo, sin descartar la posibilidad de una nueva intervención quirúrgica.
Cabe recordar que el grave incidente se registró el jueves, alrededor de las 10. La damnificada habría mantenido una fuerte discusión con su ex pareja, un funcionario policial identificado como Gustavo Scapolatempo (27).
Lo que sucedió segundos después, sólo ellos lo saben y la Fiscalía trabaja con mucha cautela.
Lo cierto es que se escuchó un estruendo que alertó a los vecinos. En minutos arribaron efectivos de la Comisaría 3ª y de la División Criminalística, además de los fiscales intervinientes, Dres. Mariano Gómez, Cecilia Gómez Castañeda y Alejandra Holgado.
El foco del conflicto serían los dos hijos de la pareja, quienes estaban al cuidado de los abuelos paternos y ella no los podía ver.
La joven fue encontrada por los paramédicos tendida en el baño. Él sostuvo que ella le quitó su arma reglamentaria y se encerró, para luego realizarse un disparo. Ella, aún no pudo dar su versión por su grave cuadro.
En la escena los peritos de Criminalística descubrieron dos impactos de bala. Uno en la base de la puerta y otro en la unión de dos paredes, lo que despiertas muchas dudas sobre cómo se sucedieron los hechos.
Scapolatempo afirma que él estuvo fuera. La fiscal Cecilia Gómez Castañeda solicitó la prueba de rodizonato en busca de pólvora, la cual fue practicada en los dos protagonistas. El resultado podría ser un valioso indicio.
Hasta anoche Galván se encontraba en estado delicado. Consciente, pero los médicos recomendaron que aún no estaba en condiciones de declarar, por lo que la representante del Ministerio Público Fiscal aguardará su evolución y la llegada de los primeros resultados de las pericias.l