Un hotelero y su hijo hablarán hoy sobre el ataque que le propinaron a un exremisero
El hotelero Luis Rodolfo Lastra intentará despejar dudas y espantar el fantasma de casi 20 años de cárcel, al declarar por el presunto intento de asesinato al exremisero Pablo Palavecino, en febrero de 2017. La víctima perdió un ojo por el ataque.
Junto a su hijo José Luis, Lastra está sindicado de apuñalar y disparar con escopeta a Palavecino, y permanecer prófugo más de cuatro meses.
Según la teoría del fiscal Rafael Zanni, Lastra buscaba vengarse ya que el remisero se había quedado con la mujer que él pretendía.
En la tercera jornada del juicio declararon varios testigos. Quizás el más importante fue el forense.
Herida clave
Para el profesional, la herida más delicada que presentaba Palavecino fue la puñalada, la cual es atribuida a José Luis Lastra.
Indicó también que al asistir a Palavecino, en 2017, tenía una notable disminución visual.
Sin embargo, aclaró que en la actualidad desconoce si ese proceso se profundizó, ya que no volvió a verlo ni hay estudios en 2019.
Para hoy, el defensor, Juan José Saín planifica hacer declarar a los Lastra.
Falta de “acreditación”
Para Saín no alcanza con lo obvio. Sostuvo que la Fiscalía y la querella deben acreditar los hechos con pruebas científicas.
En ese sentido, declararan hoy tres testigos de la defensa y después proyecta que sus clientes ofrezcan sus versiones.
El escenario más delicado es para Luis Rodolfo, ya que con los agravantes enfrenta una posible pena máxima de hasta 20 años.
También declararía José Luis Lastra, quien en la indagatoria habría manifestado que él solo fue a ver a Palavecino, a quien sindicó la propiedad de la escopeta.
Ahondó que forcejaron y al intentar defenderse, terminó hiriéndolo.
Como la indagatoria es un mecanismo de defensa, nadie descarta que hoy padre e hijo renueven su historia, como última jugada previa a los alegatos y sentencia.
Saín juega fuerte a atenuar las penas
En la calculadora del fiscal Rafael Zanni emergen dos números: 20 y 8 años.
Son las posibles condenas que enfrentan Luis Rodolfo y José Luis Lastra.
Para la defensa, “lo emotivo queda fuera del recinto, ya que dentro hay tres jueces y un proceso en desarrollo”.
El abogado se aferra a la teoría de un ataque y como resultante “lesiones graves”, más no de un “homicidio en grado de tentativa”.
Desde ese criterio, procurará convencer a los jueces que Luis Rodolfo no quiso matar a Palavecino.
En cuanto a José Luis, la puñalada habría sido “obra” de un menor de edad, ergo pasible de una pena leve.