Continúan las protestas y la represión en Hong Kong por preservar libertades
HONG KONG. Una nueva protesta prohibida por las autoridades de Hong Kong enfrentó ayer de nuevo a manifestantes y a efectivos antidisturbios de la policía, que dispararon múltiples botes de gas lacrimógeno para dispersar a las masas.
Aunque todavía no hay informaciones oficiales, los medios locales se hacen eco de al menos una decena de detenciones -formar parte de una manifestación ilegal está penado en Hong Kong con entre 3 y 5 años de cárcel y multas- y del paso de varias ambulancias por la escena de las protestas, aunque se desconoce el número de heridos.
Los enfrentamientos entre policía y manifestantes fueron particularmente tensos en la jornada del domingo.