Rompió el silencio el hombre que denunció a anestesista tucumana por tomarse selfies con pacientes desnudos
“Era muy triste lo que estaba pasando. Normalmente me las mandaba a mí o a mi mujer, pero las eliminábamos en el acto”, reveló Genaro Thompson, el integrante del grupo de WhatsApp que denunció a la anestesióloga tucumana y sacó a la luz el insólito hábito de tomarse selfies con pacientes santiagueños en total desnudez. El denunciante también se relacionó con la acusada porque habrían sido socios en una panadería en Tucumán.
Tras la primicia de EL LIBERAL, Thompson concedió una nota al diario La Gaceta, de la vecina provincia. Manifestó: “Decidí hacer la denuncia porque no quería que la gente sufriera por lo que ella estaba haciendo sin ningún tipo de problema”.
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Apenas después de haberse dado a conocer el accionar de la profesional, la acusada fue suspendida por las autoridades de Salud y enfrenta un sumario iniciado por la fiscal Carla León.
Hasta entonces, la médica trabajaba en los hospitales de Añatuya y Las Termas de Río Hondo, nosocomios donde habría tomado fotos que luego subía al grupo de WhatsApp entre sus amigos tucumanos.
Requerido acerca de cuándo empezó a recibir las fotos, Thompson respondió: “Fue hace como un año que empezó con todo esto. Le pedíamos que dejara de hacerlo, pero no nos hacía caso. Somos vecinos del barrio 140 Viviendas de Las Talitas, no de un edificio como se informó en un primer momento. Ella vivía en la casa que está al frente de la mía. La conocí cuando se entregaron las viviendas, hace dos o tres años. También conozco a sus hijos y a su esposo, que también es médico. Pero me parece que la vendió porque se había ido a vivir a Santiago del Estero”.
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Al referirse a la profesional, manifestó que es “una persona complicada. Algo mal educada y no tiene buena comunicación con las personas que la rodeaban. Con los otros vecinos del barrio fue mucho más distante, prácticamente no tenía ningún tipo de relación. Ahora me doy cuenta de que, como podía asociarse para llevar adelante el negocio, se acercó mucho”.
Reconoció que siente temor “a las represalias por parte de su familia y de ella. La verdad es que no sé qué es capaz de hacer realmente. Espero no tener ningún tipo de inconveniente. Su esposo es médico y los hijos andan armados. En el barrio todos los conocen y saben cómo se manejan”.
Al preguntársele si conocía el porqué trabajaba en Santiago del Estero, el denunciante reconoció: “Siempre nos preguntamos eso. Si sos anestesista y trabajas en Tucumán... ¿para qué te vas? Es raro. Igualmente prefiero no opinar de algunas cosas que son rumores y que no tengo ningún tipo de confirmación sobre si esas versiones son reales. Después me enteré que no tenía buenas referencias. Lamentablemente, uno a veces confía en las personas y termina mal”.
De aliados a enemigos por un negocio que terminó en pleito
En la extensa entrevista, Thompson indicó: “Al principio, con ella teníamos una relación como la puede tener cualquier vecino. Un día se le ocurrió hacer una inversión en un negocio. Como estoy en el rubro de las panaderías, nos transformamos en socios. Al mes tuvimos un problema y la relación comercial no terminó de la mejor manera”.
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“A cualquier persona ella le enviaba las fotos. Incluso a mi esposa. En aquel momento leíamos el chat y después borrábamos las fotos, pero ella las mandaba como si yo mandara una foto de la panadería a un cliente que no conozco. Una vez mandó un video de un parto... Ni lo vi. Realmente era un asco”, subrayó el denunciante.
Sí, pero no
Al ser consultado si tienen un pleito judicial, el hombre aclaró: “Sí, pero no tiene nada que ver con lo que finalmente hice por el bien de todos los pacientes que (ella) terminó perjudicando. Decidí hacerlo porque desde hace mucho tiempo ella envía por WhatsApp esas imágenes. Había personas desnudas y otras no, pero (eran) fotos que no correspondían haberlas enviado”.
Daño y secuelas
Ahondó: “Mire, con esto no voy a recuperar todo el daño que me hizo, pero quizás pare con todo lo que está haciendo. Es increíble que una profesional provoque tanto daño a personas que ni se enteraron de lo que les hacía”.