La abuela que fue atacada por el Dogo continuará su recuperación en una clínica privada friense

FRÍAS, Choya (C). Celia del Valle Peralta, la abuela de 88 años quien sufriera la amputación de parte de su pierna derecha luego de que fuera atacada por el Dogo y terminara con una gravísima mordedura en la madrugada del lunes, continuará su recuperación posquirúrgica en una clínica de esta ciudad que atiende a los pacientes de su obra social, Pami.

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La noticia que conmocionó a su familia y a toda la ciudad se desencadenó alrededor de las 5 de este lunes cuando Celia se levantó para ir al baño y en el pasillo de su casa podría haber pisado a su perro Dogo que estaba echado.

Ante la maniobra de la mujer, el canino inmediatamente reaccionó mordiéndola y generándole gravísimas lesiones en su pierna derecha, en el segmento de la rodilla y el tobillo.

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Las heridas que rompieron las partes blandas de forma completa y hasta parte del hueso, no dejaron opción al equipo de cirugía y traumatología del Hospital Zonal de esta ciudad y en función de salvarle la vida a la anciana le amputaron la zona afectada por las potentes fauces del animal.

“Ella va a necesitar un posoperatorio cuidadoso y extendido y es por ello que la paciente continuará su proceso de recuperación posquirúrgico en la clínica que tiene la cobertura social Pami”, contó a EL LIBERAL el director del nosocomio, Dr. Gustavo Yorbandi.

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Agregó: “La evolución es satisfactoria dentro del ámbito que nos da saber que la paciente tiene 88 años de edad lo que significa que las defensas, cicatrización de heridas, funciones renales, hepáticas y cardíacas no son las mismas que una persona de menor edad; ellos son pacientes sobre los cuales se debe estar en forma permanente sobre ellos”.

Como se recordará, Celia fue auxiliada por su hijo y su nieto. Fue este último quien le abrió las mandíbulas al animal para poder rescatarla.

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Ahora, la octogenaria será asistida en una clínica privada donde será examinada de forma más rigurosa y sometida a nuevos tratamientos.