Secuestraron documentación en dos viviendas allanadas por el tráfico de armas de guerra
Gendarmería Nacional allanó dos domicilios en la ciudad capital de Santiago del Estero donde se secuestraron importantes elementos que engrosarán las pruebas de la causa con alcance internacional por el tráfico de un impresionante arsenal con armas de guerra.
A pesar del hermetismo de las fuerzas nacionales intervinientes, debido a lo delicado del caso, EL LIBERAL pudo confirmar dos allanamientos en viviendas ubicadas en el Bº Centro y Lomas del Golf, por orden judicial.
Fuentes allegadas a la causa indicaron que los operativos se realizaron a primera hora del martes, mediante oficio emanado por el Juzgado Penal y Económico Nº2 de Buenos Aires, Pablo Yadarola.
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Según se supo, el escrito judicial indicaba que en los inmuebles se debía secuestrar elementos y documentación relacionada con la causa, es por ello que los uniformados incautaron documentación relacionada con compras y manejos financieros.
Las fuentes indicaron que no había orden de detención, pero sí que se debía consultar nuevamente al magistrado en caso de que en los inmuebles se encontraran armas de grueso calibre, como las ya incautadas en la causa.
Ante la presencia negativa de las armas, los gendarmes secuestraron tarjetas de créditos y facturas de compras. Todos los secuestros ya fueron remitidos a la Justicia bonaerense para ser analizadas.
Cabe remarcar que los operativos son en el marco de una causa que involucra varias provincias argentinas, España y Estados Unidos. En los operativos realizados en nuestro país se logró la detención de más de 22 personas, y se secuestró más de 2.500 armas cortas y largas, explosivos, granadas, documentación, una importante suma de dinero e incluso un cañón antiaéreo.
Según se desprende de la investigación, los operativos fueron encabezados por efectivos de Gendarmería junto con funcionarios de la Aduana y la Afip, con la participación de la AFI.
La agencia estadounidense Homeland Security también participa de la investigación junto a un fiscal norteamericano de la jurisdicción de Florida presente en el país.
Como se recordará las detenciones en nuestro país ocurrieron en Tandil, el conurbano bonaerense y en Rosario, donde se identificó a un cabecilla, un hombre de la zona de Martínez que fue allanado a las 6 de la mañana de ayer, de 50 años de edad, con antecedentes penales en Estados Unidos. Se escondió en un búnker de su casa al ver a los gendarmes, un sótano adjunto a su cochera con una gruesa puerta metálica.
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La banda poseía gran cantidad de partes para el ensamblado de armas de guerra, como fusiles de asalto tipo Colt M4, calibre 5,56 mm y fusiles Kalashnkov AK47 calibre 7,62 x39 mm, además de las municiones para las mismas. Todas las piezas provenían de Europa, luego de una compleja triangulación por distintos países, y como se detalló anteriormente eran recibidas en la Argentina para su armado.
Asimismo, la banda efectuaba diversas maniobras como la alteración de armamento, en contravención a las disposiciones legales regulatorias en la materia, de las cuales se beneficiaban varias armerías que fueron allanadas.
Tras los 52 operativos llevado a cabo hasta ayer, son 23 los detenidos involucrados en la megabanda, por ahora. Las investigaciones continúan.
‘Hay otro búnker al que no pudimos entrar, hay que abrirlo con explosivos’
Con respecto a los operativos, la ministra de Justicias, Patricia Bullrich: ‘Tenemos un arsenal en Buenos Aires, otro en Río Negro y otro en Córdoba. Todas estas armas conformaban una triangulación: de Estados Unidos y de Europa a la Argentina, donde se armaban y se enviaban a Pedro Juan Caballero, Paraguay, para enviarlas a Brasil’, precisó.
Además indicó que ‘el ingreso de las armas se daba de dos formas: una parte llegaba desde los Estados Unidos y otra -de repuestos de armas- venía de Alemania, pasaba por España y Holanda y luego ingresaban por encomienda a la Argentina’.
La ministra también confirmó la existencia de una habitación en Córdoba a la que aún no pudieron ingresar y donde se cree que habría más armamento. ‘Hay otro bunker al que no pudimos entrar porque tiene una puerta con un blindaje que hay que sacar con explosivos’, detalló.