La familia de Sabrina Rojas se enteró por TV que ella fue abusada a los 6 años
La modelo y esposa de Luciano Castro reveló la incómoda situación que vivió cuando era una niña. El acoso que sufrió de parte de un vecino suyo.
Después que Florencia Peña revelará en PH: Podemos Hablar que a sus 18 años fue abusada sexualmente por un compañero de elenco mayor que ella (ver nota aparte), Sabrina Rojas también sorprendió en el ciclo conducido por Andy Kusnetzoff al realizar una confesión similar a la de “Flor”.
La modelo y mujer de Luciano Castro contó por primera vez ante las cámaras y también para sus hermanos y muchos miembros de su familia que a los 6 años fue abusada sexualmente por un vecino de la cuadra en la que vivía.
Situación similar
“Me sucedió una situación de muy chica, con seis años, que mi familia no lo sabe y la otra vez lo hablamos con Luciano y él me decía ‘vos se lo tenés que decir a tus hermanos’...”, comenzó diciendo la también actriz y actual desarrolladora inmobiliaria.
Y siguió: “Fue con un vecino, Giuseppe, (que vivía) enfrente de mi casa. Yo tendría seis años y éramos tres amiguitas, una de las chicas era su sobrina. Nos estaba haciendo ver con unos largavistas, yo me acuerdo que nos los puso, y me apoyó por atrás. Después entendí, de más grande, qué apoyó y cómo estaba”.
Además Sabrina destacó que Giuseppe era “el vecino ideal”, que siempre saludaba a su padre diciéndole “¡Hola, Don Rojas!” y que durante mucho tiempo le costó comprender lo que había sucedido aquel día a escasos metros de su hogar.
“En el momento no te das cuenta, pero con todo lo que está sucediendo después decís ‘no pará, esto no estaba bien’. (Eran situaciones en las que) si vos te sentías incómoda decías ‘si hablo lo voy a incomodar a él, ¿cómo lo voy a decir?’’, indicó al respecto.
Sin embargo, reconoció que lo que vivió en la casa de Giuseppe le generó una molestia inusitada:
“En ese momento yo sentí una incomodidad, pero no sabía de qué se trataba, tenía seis años... Entonces cuando él vuelve a mí, no sé si les hizo lo mismo a las chicas, y me quiere volver a poner (los largavistas) le digo: ‘No, gracias’”.
“Nunca jamás lo conté, sentí que era algo incómodo. No sabía por qué, no sabía de qué se trataba la vida, y después lo bloqueé, pero de más grande, charlando, se me vino a la cabeza, y Luciano me decía: ‘¿Pero por qué no se lo dijiste a tus hermanos?’ ‘Porque ya pasó, no sé si el tipo está vivo, y también porque no quería hacerles pasar un momento (a su familia) de ‘¿cómo no me lo vas a decir?’”, indicó.
“Cuando era muy chica no llegué a dimensionar ni siquiera lo que me había sucedido. Me di cuenta de que era algo que me incomodaba y a partir de ahí tuve distancia. Me marcó, y me di cuenta de grande, charlando con mis amigas, ahí entendí que todas tenían algún caso parecido, y así y todo no se lo conté a mi familia. No sé qué pasa que no contás, es re loco”, remarcó.