"Ya me mandé una cagada, no voy a ir preso", dijo Santiago a su padre y se disparó en la sien
El joven estuvo internado en terapia por más de 8 horas. Tenía lesiones irreversibles a causa del disparo que se efectuó en la sien. Con su muerte se extingue la acción penal.
Mientras la familia de Luciana espera que ella evolucione, la de Santiago despedía sus restos en una sala velatoria de la ciudad de La Banda. El sujeto falleció horas después de dispararse, mientras estaba internado en el Centro de Salud Banda.
Allegados a Luciana sospechan que el joven bandeño -de 25 años- tenía "todo planeado". Al parecer sabía que su ex estaba sola en la casa y los hijos de la pareja se encontraban con su madre. Esa información le habría allanado el camino.
Santiago se presentó en un automóvil Volkswagen a la casa de su ex, quince minutos antes de que llegara su madre y sus hijos. Igual debió esperar a que arribaran porque ella no le dejó entrar a la casa. Cuando entraron los chicos y la víctima salió a recoger los juguetes que habían quedado en el auto de su suegra, el acusado no dudó en correr a su vehículo, sacar el arma y dispararle a quemarropa.
Tras el ataque, subió a su vehículo y huyó de la escena. Según sospechan los investigadores, dio varias vueltas antes de llegar a su casa. Dejó su vehículo estacionado a una cuadra y media y caminó hasta la vivienda.
Su padre, quien estaba dentro de la casa, lo escuchó, pero al ver que no ingresaba salió para averiguar qué sucedía. Allí fue que encontró a Santiago arrodillado en el garaje con el arma en la cabeza, dispuesto a dispararse.
Ante la dramática escena su padre trató de persuadirlo, pero fue en vano. "Ya hice una cagada y no voy a ir preso", repetía constantemente creyendo que Luciana estaba sin vida.
Esa situación se prolongó por al menos diez minutos. Cada vez que su padre se acercaba para lograr quitarle el arma, Santiago sostenía que se iba a matar. Nada pudo hacer el hombre. En un determinado momento el sujeto se efectuó el disparó en la cabeza.
Una ambulancia y la policía arribaron al lugar del hecho. Santiago fue trasladado al nosocomio bandeño donde permaneció internado, pero su cuadro era irreversible.
El proyectil provocó que la víctima perdiera masa encefálica. Cerca de las 8 de la mañana del lunes murió.