Última semana para aplicarse la vacuna contra el sarampión
La dosis también protege de la rubéola y la papera. En las Upas y hospitales públicos, la vacuna estará disponible gratuitamente hasta el próximo viernes 30, indicaron las autoridades sanitarias.
Los centros asistenciales de salud públicos de la provincia esperan a último grupo de niños que hasta el momento no recibieron la vacuna contra el sarampión, la rubéola y la papera. La campaña nacional de vacunación contra dichas enfermedades había sido lanzada el 1 de octubre y finalizará este viernes 30, por lo que instan a los padres de los niños que no se vacunaron a acercarse a cualquier UPA u hospital público para solicitar la dosis.
La vacuna es gratuita y obligatoria, no requiere orden médica y se aplica en todos los centros de salud y hospitales públicos del país.
En la Argentina estas enfermedades están eliminadas, pero siguen presentes en otras regiones. Por eso aún hay riesgo de que los niños las contraigan si no están vacunados.
La vacunación es la mejor estrategia para prevenir el sarampión y la rubéola.
Por este motivo se realiza la campaña de vacunación en la que todos los niños de entre 13 meses y 4 años inclusive deben recibir una dosis adicional de vacuna triple viral, aunque ya estén vacunados.
Gracias al compromiso de las familias y del equipo de salud de Upas y hospitales de toda la provincia, hasta hace una semana se había llegado al 80% de cobertura con la vacuna contra el sarampión y la rubéola, informaron desde el Ministerio de Salud de Santiago del Estero; y sostienen que son más de 52.000 los niños y niñas de entre 13 meses y 4 años que se vacunaron en el marco de la campaña nacional que se lanzó en octubre.
La intención es llegar al 100% de la cobertura, por lo que recuerdan que hasta el 30 de este mes hay tiempo para que tus niños tengan la vacuna.
El sarampión y la rubéola son enfermedades virales muy contagiosas que se transmiten por vía aérea y la vacunación es la estrategia más efectiva para prevenirlas.
Es necesario realizar campañas periódicas de vacunación diseñadas para asegurarse que todos los niños estén vacunados y tengan una adecuada inmunidad frente a estas enfermedades, y en caso de importaciones, no se presenten brotes de magnitud como sucede en otros países actualmente.