Llevó a su hijo a tomar un helado y al volver lo mató de dos disparos en el pecho
El nene, de apenas 10 años, murió en el acto. Su madre, una expolicía, se pegó un tiro en la cabeza, pero sobrevivió.
Tres disparos sobresaltaron a los vecinos de la casa ubicada en la calle Fragata Heroína al 3200 de la localidad de Monte Grande, en Buenos Aires.
Una mujer policía, que había sido recientemente exonerada de la fuerza, llevó a su hijo de 10 años (que sufría un Trastorno Generalizado del Desarrollo) a tomar un helado, y al volver a la casa, tomó el arma reglamentaria de su pareja, un efectivo del Servicio Penitenciario Federal, y mató de dos balazos en el pecho al nene; después intentó quitarse la vida de un tiro en la cabeza.
En ese trágico momento, el hombre se encontraba en la casa de su mamá, en la parte delantera del mismo terreno; escuchó las detonaciones, corrió creyendo que habían entrado a robar y se encontró con la dantesca escena.
La mujer permanece internada en grave estado, tras su fallido intento de suicidio.