U$S 65 millones costó reflotar el submarino nuclear Kursk

Países con tecnología de punta, como Estados Unidos o Rusia, han dejado muchísimas veces a submarinos de su propiedad hundidos después de llegar a la conclusión de que era inviable sacarlos a la superficie

Un caso especial y muy recordado es el del submarino Kursk, que colapsó en el mar Barents el 12 de agosto de 2000, con 118 tripulantes a bordo; pero a diferencia del San Juan, quedó a menos de 200 metros de profundidad y su reflotamiento habría sido decidido porque se trataba de una nave nuclear.

El gobierno ruso pagó entonces 65 millones de dólares a la empresa holandesa Smit International y Mammoet, para sacar los restos del Kursk.

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