"No hubo ninguna planificación; sí, dudas y atenuantes"
La defensa de Coria cimentó su estrategia alegando "dudas" y factores "extraordinarios de atenuación".
Al alegar, los abogados Gustavo y Francisco Zavalía y Juan José Saín resaltaron que la Fiscalía "no acreditó la acusación contra Coria".
Explotaron dudas en esa noche; también el posible uso de dos armas blancas, es decir la posible actuación de otro hombre, o bien Torres.
Para Saín, "no hubo planificación, ni actuó con dolo; es más, no hubo femicidio".
En la visión de los abogados, es posible que también Torres haya ultimado a la joven, ya que el forense no descartó que hubiese una segunda arma en la escena.
En cuanto a los cargos, Saín juzgó: "La figura que puede enrostrarse a nuestro cliente es el homicidio simple", reprimido con penas oscilantes entre 8 y 25 años.
Lo emocional
"Penalmente cuestionable, pero moralmente quizá justificable", el abogado caracterizó a Coria: "Como un hombre abatido, sin aceptar que otro le saque a sus hijos".
Después de una jornada intensa, agotadora, el tribunal pasó a un cuarto intermedio.
Luego, condenó a Coria por los delitos "homicidio doblemente calificado por el vínculo en un contexto de violencia de género, más aborto y homicidio en grado de tentativa", por las heridas a Torres.
De no apelar, Coria purgará 30 años en prisión y recién podría requerir la libertad condicional en el 2048.