Por años, ultrajó sexualmente a sus hijastras y la mayor contó todo en su escuela en Buenos Aires
Fue apresado en abril, al arribar un grupo de fiscales de la capital. La fiscal Andrea Juárez acaba de pedir su prisión preventiva.
Dos hermanitas de Quimilí padecieron múltiples vejámenes sexuales en las garras del padrastro y una de ellas terminó embarazada con sólo 12 años.
Esta dramática situación tuvo de involuntarias protagonistas a niñas de 11 y 12 años, según la causa de la fiscal Andrea Juárez.
Lejos de la ciudad, por años, el sujeto manoseó a las nenas sin que su madre advirtiera que el roce no era justamente amor patenal.
Tanto se había acentuado la impunidad que violó a la más chica al cumplir los 12. Fue por más y la víctima quedó embarazada.
Silencio temeroso
La madre jamás preguntó quién era el padre de ese niño. En el hogar, hablar e indagar era castigado con rebenques y hambre.
La otra niña también sufrió y mucho. Su tía se apiadó y la llevó a Buenos Aires. Allí, en octubre, estalló en una crisis de llanto.
Al conocer el porqué, las maestras denunciaron en la Justicia, pero el aberrante caso fue remitido a Santiago.
Resignación
En tanto, sin que nadie la defienda, la "niña-
madre" fue doblegada por la perversión del padrastro.
No había terminado de ser niña y un degenerado minó sus días, corrompiendo su cuerpo y lanzándola a la calle a buscar dinero para alimentar al hijo.
En abril, el equipo fiscal hizo base en Quimilí. Juárez vio más allá de lo obvio y en horas se nutrió de la odisea de la niña-madre.
Sin eufemismos, la fiscal puso en marcha el andamiaje legal y el padrastro fue "retirado" y enviado a una celda de la comisaría.
Hoy, la pequeña mamá transcurre sus días con el bebé en brazos. Su rostro delata más años de lo subrayado por el DNI.
Su hermanita arribó de Buenos Aires y le dio un empujoncito más al padrastro, para quien la libertad asoma hoy utópica.