Los Lucatelli y Conte ofrecieron finca para recuperar la libertad, pero no les alcanza
La propiedad está en El Zanjón y su valor, cercano a la fianza que se requiere para los tres: $ 4.500.000.
La posibilidad de que tres imputados por la estafa millonaria a la Anses puedan recuperar la libertad, ya que recibieron el beneficio de excarcelación, se torna un poco más compleja. Paola Conte, una de las primeras detenidas y beneficiaria de una pensión trucha, ofreció una finca en El Zanjón (Dpto. Capital), para cubrir la fianza no sólo de ella, sino también de su marido Héctor Eduardo Lucatelli y de su cuñada, Celeste Lucatelli.
Sin embargo, tras analizar la documentación y pedir una tasación de ese inmueble, el juez federal Guillermo Molinari solicitó que se presente otro bien más si es que la idea de los defensores es que los tres consigan la libertad. Es que el valor de la finca ubicada en el sur capitalino, estaría cerca, pero no llegaría a cubrir los $ 4.500.000 que se fijó de fianza real para los tres ($ 1,5 millón para cada uno).
Ahora, los representantes deberán buscar otro inmueble para ofrecer a la Justicia Federal y lograr así la excarcelación de estos familiares. También se le fijó una fianza real de $ 1,5 millón a Luis Villar, quien también cobraba una pensión trucha y que trabajaría para Héctor Eduardo Lucatelli.
Estos cuatro detenidos están acusados de falsificación de documentación y defraudación en perjuicio de la Anses. Todos cobraban una pensión derivada de manera indebida a través del siguiente ardid: todas se "casaron" con jubilados muertos, para lo cual se habrían valido de actas de matrimonio truchas. Estos datos eran acreditados por un grupo de empleados de la Anses que están detenidos (cuatro ya fueron despedidos y un quinto enfrenta un sumario administrativo con el mismo fin) y también figuraría en un rol clave, Cecilio Ibáñez que será el nexo y recaudador de esta presunta banda que operaba en el interior del organismo previsional.
Hasta el momento son 31 los casos de estafas detectados en contra de la Anses, lo que originó un perjuicio de más de $ 20 millones. Además, muchos de estos pensionados truchos obtenían préstamos Argenta de manera ilegal, por lo que el daño económico al Estado nacional es mayor.
Según lo determinó una auditoría interna de la Anses, Héctor Lucatelli y su hermana Celeste cobraron más de $ 800 mil; en tanto que Paola Conte percibió un poco más de $ 1.240.000. Además, Héctor Lucatelli y Paola Conte son esposos, pero habrían fraguado su divorcio para poder "casarse" con los jubilados muertos.