La víctima habría recibido 8 disparos
La muerte de Sergio Sarría causó consternación entre los vecinos del barrio Mishqui Mayu por la brutalidad del hecho.
En un primer momento se había deslizado que había recibido 4 impactos de bala; anoche habían elevado ese número a 8 disparos. La autopsia, que será practicada hoy a primera hora, terminará de develar cuántas heridas sufrió.
Sergio tenía 37 años, estaba separado y era el padre de dos niños. Trabajaba como chofer de la Subsecretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia, y vivía solo junto a la casa de su madre.
Lo que sucedió puertas adentro de la casa materna de los dos protagonistas era hasta anoche un misterio.
Qué se dijeron entre sí, sólo Alejandro, el acusado, podría develarlo ante la Justicia.
Ahora el homicida podría enfrentar penas de hasta prisión perpetua si se comprueba su responsabilidad y si se corrobora que comprendía la criminalidad de sus actos.