En Temuco, Francisco oró por las "víctimas de la injusticia"
El Pontífice saludó en Mapuche y pidió un momento de silencio para recordarlas a quienes murieron "víctimas del dolor".
Este miércoles por la mañana, el papa Francisco llegó a Temuco, en la región de la Araucanía, territorio reivindicado por el pueblo originario de los mapuches y celebró una misa, con elementos tradiciones de los indígenas.
El Pontífice dio inicio a su homilía saludando en lengua mapuche: "Mari, Mari. Küme tünngün ta niemün" (Buenos días, la paz esté con ustedes).
"Doy gracias a Dios por permitirme visitar esta linda parte de nuestro continente. Tierra bendecida por el Creador con la fertilidad de inmensos campos verdes, con bosques cuajados de imponentes araucarias", manifestó, recibiendo aplausos de todos los presentes.
"Quiero detenerme y saludar de manera especial a los miembros del pueblo mapuche, así como también a los demás pueblos originarios que viven en estas tierras australes: rapanui, aymara, quechua y atacameños, y tantos otros", continuó.
Luego, se expresó respecto a las "injusticias" que afectan a los pobladores mapuches: "Arauca tiene una pena que no la puedo callar. Son injusticias de siglos. Celebramos la misa en este aeródromo, el cual tuvieron lugar graves violaciones de derechos humanos", destacó.
"No permitas que nos gane el enfrentamiento y la división. Hay que pedir con insistencia por el bien de nuestra tierra y sus hijos. Una de las principales tentaciones a enfrentar es confundir unidad con uniformidad", agregó.
Finalmente concluyó: "La unidad pedida por Jesús reconoce lo que cada pueblo está destinado a aportar en esta bendita tierra. Necesitamos de la riqueza que cada pueblo tenga para aportar y dejar la lógica de creer que existen culturas superiores e inferiores. La unidad reclama que nos escuchemos y principalmente que nos reconozcamos".